Rafael Louzán, un celestino electoral

Rafael Louzán carga contra el sistema que lo ha elegido como presidente de la Federación Española de Fútbol. Lo considera anticuado. Y eso que es un universo que maneja a la perfección. Su habilidad para tejer alianzas es ampliamente conocida en la provincia de Pontevedra, especialmente, y en toda Galicia, en donde a nadie sorprendió un ápice que resultase elegido. Nadie se mueve igual de bien en situaciones de incertidumbre, generando un sistema de clientelismo en el que se fajó durante su etapa política en el Partido Popular. Hasta su caída en desgracia, él era el hombre fuerte de Alberto Núñez Feijóo, el que tenía perfectamente controlado quién era quién en cada Concello y qué piezas había que tocar cuando llegaban las elecciones. El hábitat donde este natural de Ribadumia se mueve como pez en el agua.

Cuando vio bloqueado su camino político -Feijóo tiró del actual presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda, para intentar recuperar las huestes-, Louzán vio abiertas las puertas del fútbol. De nuevo, en un momento de debilidad, con el fin de la larga -y no demasiado clara, con suspensión y acusaciones de malversación de fondos, falsedad documental y apropiación indebida- etapa de Julio Meana -y su sobrino Carlos-. José García Liñares estuvo tres años en la presidencia, tiempo que le sobró a Louzán para tejer sus alianzas y aterrizar en la Gallega hace una década. Quien haya seguido su carrera sabe que, desde el primer momento, su mira estaba puesta en la Española.

Como presidente, se mostró ducho en el control. Ni siquiera el hecho de que su vicepresidente en el inicio, Gustavo Falque, se presentase en su contra cuatro años después le perturbó un ápice. Nadie en el fútbol gallego habla mal de él. Nadie se ha molestado siquiera en intentar ser oposición. Ni cuando la condena por prevaricación que todavía pesa sobre él se concretó. Así como Julio Meana se topó con la Dirección Xeral de Deportes de la Xunta con el nacionalista Santiago Domínguez el frente, Louzán nunca tuvo problema alguno con la regida por el Partido Popular. Con el que existe un pacto tácito de no agresión cuando no un apoyo expreso. Lo de ahora en la Española no es más que lo mismo de siempre a mayor escala.

Una eficiente campaña a nivel de medios en Madrid

La campaña electoral de Rafael Louzán fue impecable en la búsqueda de apoyos. Tiene el del hasta ahora enemigo irreconciliable de la Federación Española, Javier Tebas, presidente de La Liga, y de otra pata fundamental en el mundo del fútbol como la AFE. Y se ha ocupado de cerrar posibles vías de agua como el habitual denunciante en el fútbol español en los últimos tiempos, Miguel Galán, del Centro Nacional de Formación de Entrenadores. 

Con los votos atados, comenzó la breve campaña en los medios de comunicación. También muy controlada y centrada, principalmente, a nivel estatal, como corresponde al cargo al que optaba. Su voz y su rostro se han hecho conocidos a escala española en las dos últimas semanas. Con periodistas acostumbrados a cubrir la información de la Federación Española con la suficiente camaradería como para llamarle Rafa. Su nombramiento ha tenido contestación en medios generalistas, pero ni mucho menos en los deportivos de nivel nacional. Los que él ha cuidado con especial mimo. Una vez más, todo un experto en los movimientos precisos en época electoral. Con algún pelillos a la mar con medios gallegos.

El Mundo: "El fútbol elige barro"

“El fútbol volvió a elegir el barro que supone un presidente, ya electo, que tiene sobre sí una condena de siete años de inhabilitación para cargo público por un delito que es tan feo como grave: prevaricación. El ruido no va a desaparecer de la Federación en los próximos meses. Habrá que estar atento a quién elige Louzán como vicepresidente primero, pues ese nombre será, probablemente, su sucesor”.

El País: “Un corrupto al frente del fútbol”

“La Federación ahonda en su descrédito mundial al elegir como presidente a Rafael Louzán. La elección vuelve a mostrar todos los vicios de un organismo endogámico y clientelar. Todo ese entramado de negocio, espectáculo y sentimientos que es el fútbol no se merece que sus responsables elijan a un prevaricador".

La ministra anuncia que el CSD estudiará cómo bloquear a Louzán

La ministra de Educación, Formación Profesional y Deportes, Pilar Alegría, afirmó ayer que "es muy difícil de explicar y de entender que una persona que está condenada por prevaricación asuma la presidencia de la Real Federación Española de Fútbol", aludiendo a la posible inhabilitación para cargos públicos del elegido Rafael Louzán. "Es muy difícil de explicar y de entender que una persona que está condenada por prevaricación asuma la presidencia de la Real Federación de Fútbol en este país. Sobre todo porque en la misma situación procesal del señor Louzán yo, por ejemplo, no podría estar sentada en esta mesa. Ni ninguno de los compañeros que está conmigo a mi lado. Pero ni podría estar aquí sentada ni podría ser concejal de mi pueblo", comentó Alegría en la rueda de prensa del Consejo de Ministros.

"Tengo que empezar también siendo absolutamente prudente porque saben que ahora mismo todavía hay por delante dos días en los que las personas que han participado en este proceso electoral pueden presentar posibles recursos", dijo la portavoz del Gobierno de España. "Hasta que no acabe este plazo, como digo, de dos días en el que puedan presentar recursos aquellos que se han presentado en este proceso electoral, me permitan que sea también, por tanto, ciertamente cauta. Pero es verdad que ayer se produjo esta votación y que 90 personas de las que conforman esta asamblea dieron el apoyo al señor Louzán", añadió la titular de la cartera de Deportes en su comparecencia.

"Lo que sí les puedo decir, cuando pasen estos dos días, lógicamente el Consejo Superior de Deportes sí va a estudiar todos los pasos que podemos dar. Porque además creo que también me parece muy importante recordar que se han sometido a elecciones las 66 federaciones de nuestro país y con el mismo reglamento el resto de las federaciones españolas han elegido a personas de reconocido prestigio. El fútbol, en cambio, ha elegido este camino", zanjó la ministra de Deportes.

El CSD quiso bloquear la candidatura de Louzán pero no pudo hacerlo al no existir una denuncia del caso. Ahora, tras su esperado nombramiento, pretende que el mandato del pontevedrés muera antes de nacer pero no está nada claro que pueda hacerlo.