Martín de la Puente: “Una final de Grand Slam te hace ver el tenis de otra manera”

Han pasado ya un par de días y la emoción sigue ahí, pero la calma empieza a abrirse paso para analizar con cierta frialdad la historia del tenis gallego que Martín de la Puente escribió en Londres el pasado domingo. El vigués jugó la final de Wimbledon ante Alfie Hewett y aunque la perdió, siente que es un punto de inflexión. “El principio de algo”, apostilla el vigués al otro lado del teléfono, con una apabullante madurez. “No quiero que esto sea una semana en la que sonó la flauta”, reflexiona, antes de afirmar entre risas: “Ojalá os malacostumbre a más finales”.

El caso es que el canterano del Náutico jugó la primera final de un cuadro individual de Grand Slam del tenis gallego y del tenis en silla español. Martín ya sabe lo que es ser campeón en dobles -lo logró en el US Open-, pero “es muy diferente” a esto. “Me costó dormir y un poco todo en general”, recuerda. “Se vive de otra manera y más si es Wimbledon”, reconoce. “Es algo indescriptible, especial, que te marca y te hace ver el tenis de otra manera. Nos hubiese encantado que hubiera acabado de otra forma, pero la semana fue ultra positiva. Estoy muy contento por lograr este sueño, pero ahora hay que seguir”, analiza De la Fuente, centrado en lo que viene.

“Es lo bueno de la raqueta, que cada semana sigues mejorando”, destaca el tenista olívico, que se siente “competitivo” de cara al futuro. “He ganado a todos en el ránking. Sé que no es lo habitual, pero quiero cambiar esa dinámica”, subraya el número 4 del mundo.

En ese sentido, De la Puente refrenda que “una final de Grand Slam da mucha confianza y anima a sentirse capaz”, pero insiste en que el tenis es semana a semana. “No podemos perder el horizonte”, destaca. Martín está abriendo un camino para que puedan seguirlo niños y niñas en su situación. “En todo lo que pueda ayudar, soy el primero para simplificar dudas y miedos sobre la discapacidad en el deporte”, comenta el canterano del Náutico, que quiera “darlo todo” en su carrera para “el día de mañana tener la cabeza tranquila” con su esfuerzo. “Pero me centro en intentar ser mejor tenista y persona día a día”, concluye. Con ese sentimiento encara el tramo final hacia sus terceros Juegos Paralímpicos: “Los veo bien y con mucha ilusión. Más maduro y más preparado. Tengo ganas de que lleguen”.