Balonmano | Liga Asobal
Por unas felices fiestas
Fútbol | Primera División
En su regreso a España tras cinco años en la cantera del Tottenham, Yago Santiago (Vigo, 2003) vivió una montaña rusa de emociones en el Elche. De un impacto brutal en la Segunda División, a una rotura de cruzado en enero que le hizo vivir el ascenso de su equipo desde fuera del campo. Y por el medio, otra operación, en este caso de hombro, para recuperar del todo una dolencia anterior. En el horizonte aparece la máxima categoría y un enfrentamiento “especial” contra el Celta, en el que se formó antes de irse a Londres y donde compartió vestuario con la famosa generación del 2003 de los Hugos -Álvarez y Sotelo-, Javi Rodríguez y Damián. Para alcanzar ese futuro, ha minimizado sus vacaciones y sigue trabajando diariamente en su recuperación en la ciudad ilicitana.
¿Cuánta alegría libera subir a Primera División?
Los dos días después de lograr este ascenso en Coruña fueron tremendos. Nunca me habría imaginado celebrarlo de esa manera, con tanta gente. Había 200.000 personas cuando dimos la vuelta a la ciudad en el autobús. Fue algo que me hizo darme cuenta del equipo en el que estoy, de la ciudad en la que vivo y del escudo que represento. Me siento muy feliz.
Y más después de estos meses difíciles por la lesión.
Pues sí. Fue un golpe duro, sobre todo el primer mes. Tuve que pasar el duelo. Pero luego te das cuenta de que todo pasa por algo y creo que se tenía que dar así para jugar el año que viene en Primera siendo mejor futbolista, mejor persona y sabiendo que en fútbol, de un día para otro estás fuera. Por eso hay que disfrutar el doble de lo que nos pasa.
“Nunca me habría imaginado celebrar así el ascenso; había 200.000 personas en las calles de Elche”
Si la Segunda División ya es larga de por sí, imagino que lo es mucho más sin poder ayudar al equipo desde dentro del campo.
Completamente. Lo hablaba mucho con los compañeros. Vivir desde fuera partidos tan importantes, en los que nos jugábamos ascender, no se lo recomiendo a nadie. Se lo decía al míster el otro día, que al final uno se está jugando también ascender y no participa en el campo. Pero fue bonito. Tenía plena confianza en ellos y sabía que se iba a acabar dando.
¿Cómo está la rodilla?
La verdad es que está respondiendo muy bien. También es cierto que me esfuerzo mucho y, de hecho, sigo en Elche trabajando a diario. Es una lesión en la que es mejor ir poco a poco y no adelantar plazos. Por ahora va todo muy bien, así que estoy contento y tranquilo. A ver si en agosto empiezo a entrenar con el grupo y a coger ritmo.
¿Y el hombro?
Arrastraba esa lesión desde que estaba en el Tottenham. Se me salió en un partido y, a partir de ahí, ocurría con muchísima facilidad. Pasé dos años con dolores y en varios partidos se me dislocó. Así que aprovechamos para arreglarlo.
Volviendo a lo positivo, fue una de las sensaciones de la Liga en los primeros meses. ¿Esperaba un impacto así?
Internamente, sabía que si estaba bien mental y físicamente, las cosas iban a salir. Vine muy mentalizado porque sabía que era una oportunidad para poner mi nombre en España otra vez. Tenía claro que había que trabajar y estar muy metido mentalmente porque venía de una Liga muy diferente, que no era profesional. Sí es cierto que estaba en un club muy grande y en dinámica de primer equipo, pero tenía que demostrar de lo que era capaz. Creo que lo hice bastante bien, pero me queda mucho aún y siento que voy a volver mejor.
“Me quito el sombrero con el fútbol del Celta y me alegro mucho por mis compañeros del 2003”
¿Qué diferencias ha notado con su experiencia en Inglaterra?
Compitiendo, diría la presión. En la liga de filiales de allí no tienes ninguna. Cuando pierdes estás jodido, pero realmente no hay mucho problema con el equipo. Pero aquí juegas para familias, para niños, para aficionados que sienten el Elche y tienes que sacar los tres puntos. Y a nivel de fútbol, veo el de Inglaterra un punto más físico, pero es algo que no noté mucho. Al final, allí jugaba contra chicos de mi edad y otros filiales y aquí contra padres, contra gente con mucha experiencia. Así que tampoco hay mucho cambio. Lo que más noté, sin duda, es la presión.
¿Qué expectativas tiene para la Primera División?
Hablando con compañeros ya me decían que, obviamente, es una de las mejores ligas del mundo y con los mejores futbolistas. Nunca he jugado a ese nivel y no sé lo que me voy a encontrar, pero tengo confianza plena en el equipo, en el club y en mí. Supongo que el objetivo será mantenernos, pero soy una persona que siempre quiere más, así que simplemente espero demostrar a la gente lo que es el Elche, el equipazo que tenemos y todo lo que somos. Y la Primera División es un escaparate tremendo para hacerlo. Estamos preparados.
A nivel individual entiendo que tiene la misma perspectiva.
Lo primero es la rodilla. Sé que es una lesión complicada, que es mucho tiempo y que es un reto grande. Porque son nueve meses de recuperación y vuelves para enfrentarte a los mejores. Pero confío mucho en mí, me veo muy bien y sé que voy a regresar mejor.
“En fútbol estás fuera de un día para otro, así que hay que disfrutar el doble de lo que nos pasa”
Como futbolista, más allá de la lesión, podemos dar el año por muy bueno. Y como aficionado, el Tottenham ganó la Liga Europa y el Celta se clasificó para jugarla.
La verdad es que sí. Me alegro mucho por el Tottenham porque estuve cinco años allí, pisando mucho el primer equipo y sé lo duro que trabajaban para ganar algún título. Es algo que tenían entre ceja y ceja. Lo han conseguido este año por fin, así que estoy muy contento por ellos. Y el Celta es el equipo de mi ciudad. Estuve allí tres años maravillosos y me puse muy contento. Seguí los partidos para ver si conseguían el objetivo y me quito el sombrero porque aparte de lograrlo, el fútbol que han jugado es buenísimo. Me alegro mucho por mis compañeros del 2003, que hay varios en el vestuario.
Siguiendo con el Celta, si todo va bien podrá jugar en Balaídos.
Siempre me lo dicen mis amigos, que tienen muchas ganas de verme jugar en Vigo. Volver a ver a mis compañeros y jugar contra el Celta en Balaídos va a ser especial. Ojalá que juguemos ahí cuando ya esté bien. Espero que se dé porque tengo muchas ganas.
¿Cómo fue marcharse de casa con 16 años a otro país con otro idioma y otra cultura?
Ya te puedes imaginar que es un cambio muy grande. Al principio es duro. Te tienes que hacer a la nueva realidad. Pero dar un paso así siendo tan joven te fortalece muchísimo y te prepara para el futuro. Y realmente es lo que sucedió. El primer año fue complicado, pero maduré mucho. A partir de ahí, los años siguientes fueron para disfrutar y el último trajo la recompensa a todo el camino porque ganamos todo. Fue un cierre perfecto de mi etapa allí.
"Mis cinco años en el Tottenham fueron de pasar de niño a hombre; allí maduré hasta ser la persona que soy hoy"
¿Qué aprendizajes saca de esa etapa en el norte de Londres?
Muchos. Más que aprendizaje, fue pasar de niño a hombre. Poco a poco fui madurando hasta ser la persona que soy hoy. Por eso me siento muy agradecido por aquella oportunidad y por vivir este camino de crecimiento. Y también de disfrute, que me lo pasé muy bien allí.
Cinco años en Inglaterra y ahora en Elche. ¿Cuánto se echa de menos estar en Vigo?
Mucho. Allí están mis padres, mi abuela, mis amigos... Tengo muchas ganas de verlos. Por la lesión, ahora es momento de trabajar. Más adelante tendré una semanita e iré para aprovechar el tiempo en casa. Vigo es un sitiazo para estar en verano. Galicia en general lo es. Tengo muchas ganas de descansar para luego volver con más fuerza al trabajo aquí.
Contenido patrocinado
También te puede interesar
Balonmano | Liga Asobal
Por unas felices fiestas
Balonmano | División Oro
El Carballal busca en casa la tercera victoria de la temporada