Un vendaval deja al Celta Zorka sin ascenso

Un vendaval dejó ayer al Celta Zorka sin ascenso por segundo año consecutivo. La derrota del sábado ante el Leganés por tres puntos –después de ir ganando por 19 en el tercer cuarto– obligó al equipo vigués a jugarse el billete a la Liga Femenina contra el Campus Promete, la formación más potente de las ocho que iniciaron la fase de ascenso en la localidad tinerfeña de San Cristóbal de La Laguna, y las celestes no tuvieron opciones en ningún momento.

Después de una temporada casi inmaculada en lo deportivo, con 24 victorias en los 26 partidos de la liga regular, y de sobreponerse a tres lesiones graves de rodilla que lo dejaron en cuadro para afrontar el tramo final de la campaña, el Celta Zorka volvió a caer en el último encuentro por segundo año seguido, un varapalo que seguramente resultó menos doloroso por la diferencia que se dio ayer entre los dos contendientes.

Desde los primeros compases del choque, el cuadro vigués comprobó que enfrente tenía un equipo de un potencial superior en todas las facetas, primero en la pintura, donde el dominio del rebote ofensivo permitió a las riojanas obtener las primeras ventajas. Hildur Kjartansdottir y Raquel Carrera no eran capaces de frenar a la poderosa Vanessa Gidden y a los ocho minutos, con 9-17 en el marcador, Cristina Cantero paró el partido para frenar la sangría que estaba sufriendo su equipo y para introducir un cambio importante. Elo entró por Hildur y la pelea en la pintura se igualó durante algunos minutos. Las viguesas, a pesar de la agresiva defensa del Campus Promete, consiguieron reducir distancias por medio de Germán y Elo para llegar al final del primer cuarto con cinco puntos de desventaja (15-20, min.10).

El Celta Zorka inició el segundo periodo con algunas imprecisiones que permitieron al conjunto riojano correr y anotar con facilidad. Además, cuando las celestes habían conseguido equilibrar en parte la lucha en el interior, el Campus Promete exhibió también su acierto en el exterior. En ataque, sólo Celia García y Elo conseguían ver aro, con una Raquel Carrera muy vigilada y menos precisa que en los anteriores partidos, y una Anne Senosiain que tampoco conseguía anotar de tres. De esta manera, un triple de Julien cerró la primera parte con una renta de once puntos para el cuadro logroñés (28-29, min.20).

Por si quedaba alguna duda, el Campus Promete rompió el encuentro en el comienzo del tercer cuarto. Una penetración de Benet, dos tiros libres de Julien y una antideportiva de Senosiain que terminó con triple de Vucurovic disparó la renta de las riojanas hasta la frontera de los veinte puntos en apenas dos minutos (28-47, min.22).

El Celta Zorka no tiró la toalla todavía, pero a cada intento de acercarse en el marcador respondía el rival con un triple y los veinte puntos de diferencia se mantuvieron al final del tercer periodo (45-65, min.30).

A pesar de la ventaja, el Campus Promete no bajó el ritmo y en el último cuarto disparó su renta hasta los treinta puntos. En los instantes finales, Cristina Cantero dio entrada a las júnior Mara Neira y Cristina Freire. El ascenso del Celta Zorka tendrá que esperar.

"Me quedo con el trabajo, hemos dejado alto el nombre del club y de la ciudad"

Cristina Cantero reconoció al final del partido la superioridad del Campus Promete, pero se mostró orgullosa del trabajo de su equipo. "El partido de hoy (por ayer) la verdad es que no ha tenido mucha historia. Hemos estado bien los dos primeros cuartos, pero ellas tienen mucha calidad en sus acciones, nos metían verdaderos canastones y aunque hemos peleado, hemos terminado a once puntos al descanso. Luego, el inicio del tercer cuarto ha sido durísimo, nos han metido mucho de tres, y ya no hemos podido", explicó la entrenadora del Celta Zorka, que agregó que "estoy muy orgullosa del equipo. Uno de los objetivos era estar el domingo, y lo hemos conseguido, el trabajo de grupo ha sido excepcional, las jugadoras han crecido y me quedo con eso, con el gran trabajo. Lástima que la suerte no haya estado con nosotros en las lesiones, pero hemos dejado alto el nombre del club y de la ciudad y espero que podamos volver la próxima temporada".

Por su parte, la capitana Anne Senosiain afirmó que "hemos venido a luchar desde el primer momento y al final nos ha pesado un poco el cansancio. Ellas son un equipo muy potente y nosotras hemos fallado mucho y en defensa hemos notado que las piernas estaban cargadas, pero estoy muy orgullosa de todas".