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Una ruta en bicicleta que terminó en el hospital y, tras la investigación policial, tras sufrir un intento de homicidio. Esto fue lo que le sucedió al exprofesinal porriñés Jacobo Ucha, que actualmente se ocupa de la dirección técnica de la Federación Galega de Ciclismo.
El pasado 29 de julio, Ucha circulaba por Baiona tras hacer la habitual ‘vuelta a valle’ con otro grupo de ciclistas. Un coche los adelantó en un paso de cebra y casi los envía al suelo. Cuando el porriñés se dirigió a recriminarle la acción, el conductor del vehículo arrancó y, por el carril contrario a la marcha, lo alcanzó y lo envió al suelo para, a continuación, arrastrarlo durante unos cuarenta metros y llegando a alcanzar 20km/h. según el GPS del deportista. Ucha terminó en el hospital y, por suerte, no sufrió fracturas aunque todavía está de baja médica por las profundas heridas sufridas.
Una vez investigados los hechos, el conductor del vehículo, Hugo P.G., vecino de Vigo, fue detenido y, posteriormente, puesto en libertad. El caso se instruye en el juzgado número seis de Vigo.
En un primer momento, el afectado, Jacobo Ucha, se planteó presentar él una denuncia por estos hechos, pero finalmente no fue necesario porque la propia investigación del accidente determinó que, presuntamente, el conductor del vehículo causante del atropello y arrastre había cometido un delito grave como es una tentativa de homicidio. Evidentemente, se persona en el proceso como víctima y persona afectada.
La investigación policial tardó varios días para recabar todos los datos y testimonios, entre los que están ciclistas que circulaban con Jacobo Ucha y también testigos oculares que vieron desde una terraza los hechos antes de socorrer al porriñés.
El atestado policial, al que tuvo acceso Atlántico, recoge en sus conclusiones que el vehículo “acelera siendo consciente de la situación de peligro hacia la integridad física del denunciante y con desprecio hacia su vida e incapacidad de salir de la situación angustiosa y de grave peligro; ni tampoco el conductor del vehículo realiza maniobra alguna para evitar el arrastre por el firme del asfalto siendo consecuente de la gravedad de la situación”. Después, describe cómo Ucha fue auxiliado por diversas personas, algunas de ellas a las que se les tomó testimonio.
El exciclista y ahora técnico federativo pasó dos semanas hospitalizado debido a lo profundas que fueron algunas de sus heridas y, en estos momentos, se encuentra al final del proceso de recuperación, ya que algunas de estas heridas todavía están terminando de cerrarse. Su bicicleta quedó destruida.
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