Sergio Carreira abre una operación salida con escaso tráfico

Sergio Carreira lidera la operación salida del Celta en los últimos días de mercado y, hasta el momento, el tráfico es escaso. Siempre es complicado de adivinar lo que puede suceder en el final de las transacciones, pero existen pocas opciones de que otros jugadores se marchen de club vigués. Si bien, todavía faltan tres días y los avances pueden ser sobre la hora.

En lo inminente, el lateral está muy cerca de sellar su salida al Valladolid de Segunda División. Ayer se estaban ultimando los detalles del acuerdo entre ambas entidades y, también, con el entorno del futbolista. En todo caso, Sergio Carreira dispone de más opciones que la del equipo pucelano para recalar en caso de que se termine por torcer esta vía, algo que parece improbable.

La marcha del lateral celeste sería mediante una fórmula de traspaso o de cesión con opción de compra obligatoria en caso de ascenso. Todo ello ya depende del espacio salarial que pueda ganar el Valladolid en los últimos días de mercado porque también está a punto de culminar otras operaciones como la salida del lateral Iván Fresneda. En todo caso, la previsión del Celta es que reciba entre 700.000 y un millón de euros. Carreira, de esta manera, terminaría por tercera campaña consecutiva en un equipo de Segunda tras estar cedido en el Mirandés y el Villarreal B.

Futbolistas del Celta con un pie fuera

Su marcha se da por casi segura en el Celta, pero más dificultades aparecen en el resto de futbolistas. Renato Tapia se encuentra en la rampa de salida desde el inicio de la pretemporada a falta de un año para expirar su contrato. Existieron ofertas por el peruano, pero ninguna de ellas fructificó, a pesar de que el equipo vigués trasladó al jugador el deseo de buscar una salida. En gran medida porque Rafa Benítez pidió otro mediocentro para la plantilla en una posición en la que ya se encuentra Fran Beltrán, Carlos Dotor, el joven Hugo Sotelo e, incluso, Luca de la Torre. En su momento, el futbolista paró su marcha al Lyon y parece que se encuentra a gusto en el Celta. Aunque la falta de minutos podría cambiar su visión.

El caso de Miguel Baeza es todavía más agudo. El jugador sabe que no entra en los planes del entrenador madrileño porque no encaja en los esquemas tácticos del preparador. La opción de recalar en el Rio Ave portugués desapareció y, en la actualidad, carece de pretendientes. Una situación similar a la que vive Gonçalo Paciencia, aunque su entorno se encuentra a la búsqueda de un destino tras no jugar en lo que va de campaña. Por su parte, Agustín Marchesín también vive una situación complicada con la llegada hoy o mañana de Vicente Guaita. El Celta vería con buenos ojos su salida, pero no se conoce el interés de ningún equipo.