La salvación estadística, a tiro para el Celta

Suceda lo que suceda este viernes en Vallecas, la primera vuelta del Celta es buena. Pero una victoria ante el Rayo le haría superar una frontera estadística trascendente y tranquilizadora. Porque nadie con 27 puntos, que son los que alcanzaría el conjunto vigués de sumar tres en tierras madrileñas, al final de la primera vuelta ha acabado descendiendo desde que la Primera División cuenta con 20 equipos, tres puntos por victoria y tres plazas de pérdida de categoría. Es decir, desde la campaña 1999/2000.

Este triunfo sería un aval prácticamente definitivo para tener la tranquilidad de crecer en la segunda vuelta. Y de mejorar ese aspecto tan manido del rendimiento fuera de casa. Ese salvoconducto estadístico no sería pleno en caso de empate o de derrota. Porque con 25 puntos tras los 19 primeros partidos, que supondría un empate en Vallecas, sí hay un caso de descenso: el del Valladolid de la temporada 2003/2004. Los pucelanos sólo lograron añadir 16 puntos más en la segunda vuelta y bajaron a Segunda con 41, precediendo precisamente al Celta, que acabó con 39. En todo caso, es una ocasión dentro de 75 descensos en esas 25 campañas (1,3%).

De perder en Vallecas y quedarse con 24 puntos, a ese Valladolid 03/04 habría que añadir ya cuatro equipos más: el Oviedo 00/01, la UD Las Palmas 01/02, el Alavés 02/03 y, ya más recientemente, el Girona 18/19. Cinco caídas a Segunda desde esa altura en 25 temporadas, sólo un 6,6%.

En cuanto a la historia reciente del propio Celta en Primera, esta primera vuelta ya mejora, con los actuales 24 puntos, a 12 de las 19 temporadas disputadas en la máxima categoría con este sistema de puntuación. Una victoria en Vallecas sólo dejaría cinco precedentes mejores: 31 (15/16), 30 (05/06 y 02/03), 32 (01/02) y 29 (99/00).

El Elche evitó la caída del Eibar con esos 27 puntos

Toda estadística tiene una trampa. La ahora presentada tiene un matiz a tener en cuenta: no hubo ningún equipo con 27 puntos al final de la primera vuelta que acabase en Segunda, pero por circunstancias no estrictamente deportivas. El Eibar de la temporada 2014/2015, con Gaizka Garitano al frente, cerró las 19 primeras jornadas con 7 victorias, 6 empates y sólo 6 derrotas para acumular esos 27 puntos. En la segunda mitad de curso, se cayó hasta acumular 15 derrotas, 2 empates y únicamente dos victorias y acabar con 35 puntos en la antepenúltima plaza. Es decir, en descenso en condiciones normales.

Pero ese curso no lo fueron porque el Elche, tal y como se preveía, acabó siendo descendido por impagos, lo que permitió al Eibar mantenerse en Primera. Con todo, es un aviso para navegantes de que segunda partes -de temporada- no siempre fueron buenas.