El Celta se queja de los arbitrajes que sufre otra vez

Existe el convencimiento general de que la actuación combinada de Isidro Díaz de Mera, como árbitro de campo, y Jaime Latre, como responsable del vídeo arbitraje, en la jugada delgol anulado al Celta el pasado viernes en Montilivi fue errónea. En el fondo y en la forma. La conclusión es que el tanto debió subir al marcador o, al menos, la consulta con el VAR del colegiado principal debió ser más detenida, con aproximación a la pantalla.

Lo primero que llama la atención es que Díaz de Mera deja acabar la jugada, con el remate final de Luca de la Torre a gol, sin señalar la presunta falta del céltico Dotor sobre Gazzaniga. Su pitido, apuntando hacia el campo celeste, no llegó hasta que el balón ya estaba en la portería. A partir de ahí, la jugada era revisada en el VAR, pero no hubo consejo de ir a visionar la acción o, si lo hubo, no fue aceptado por el árbitro de campo.

Con todo, lo que más chirría en Vigo es que esta misma pareja de árbitros, repartiéndose los papeles igual que en Girona el pasado viernes, ya le habían pitado al Celta en el duelo ante el Real Madrid en Balaídos de la tercera jornada de Liga. Y en ese partido, al poco de comenzar, le fue anulado un tanto a Jorgen Strand Larsen por un agarrón sobre el meta madridista, Kepa. De aquella, Díaz de Mera sí había señalado el tanto y fue tras ser advertido por Jaime Latre cuando acudió al televisor y decidió cambiar su decisión.

Cuatro puntos menos

Tras la anulación del viernes, Rafa Benítez levantaba una de sus manos en protesta mostrando cuatro dedos. Se refería el técnico celeste a los cuatro goles que ya le han sido anulados al Celta en los once partidos disputados con cierta polémica arbitral. El primero, el mentado de Larsen ante el Real Madrid en la jornada 3; el segundo, el de Bamba tras golpear el balón en el larguero y con dudas sobre si entró en su totalidad o no en la jornada 5; el tercero, el de Larsen en Las Palmas tras un forcejeo mutuo de Douvikas con un defensa canario en la jornada 8; y el cuarto, el del viernes.

Todos ellos se produjeron con 0-0 en el marcador y, en caso de tener validez esos tantos, los cuatro partidos habrían acabado en empate. Cuatro puntos que situarían al Celta fuera de descenso.

“Non se está respetando nin a un club centenario nin ó celtismo”

El Celta decidió ayer que Carlos Cao, el hombre de confianza de Marián Mouriño dentro de la directiva celeste, ejerciese de portavoz. Y el director del Área de Operaciones y Relaciones Institucionales habló sobre el sentir del club acerca de los arbitrajes que está recibiendo el equipo, con decisiones controvertidas como el gol anulado a Luca de la Torre el viernes en Girona. “A verdade é que é complexo ser capaz de dicir cal é realmente o sentimento que temos como clube e o que ten o celtismo. Tal vez, incertidume. Porque non atopas explicación ó que está pasando”, dijo. Además, recordó que “esta semana dante unha explicación -en la reunión con Medina Cantalejo- e hoxe xa non vale. O de onte é totalmente contrario á explicación”.

Por todo lo antedicho, Cao reconoce que en Príncipe y Mos “a situación é de preocupación. Veremos como actuaremos pero pouco máis hai que facer”. De hecho, aunque no lo descartó, considera que realizar una protesta formal no parece el camino. “Se valese dalgo… Xa tivemos unha reunión e quedouse nalgo que non pasou. A realidade é a que mirades. Unha pena porque estabamos facendo un partido moi completo e esa xogada dramática cambia todo e quedas con cara de incredulidade”, afirmó.

No quiso cifrar Cao los puntos que el club considera que ha perdido por esas decisiones arbitrales. “Non entraría en se son 14, 15 ou 20 puntos. Tamén hai que sumar erros nosos. Tal vez fosen 6 ou 10 puntos os que podiamos sumar nesas situacións. A cuestión é que buscas solución a un problema cando sabes que pasa, pero neste caso non temos explicación”, reiteró. Y terminó su discurso con su mensaje más contundente: “Temos que afrontalo. Pero queremos que a un club centenario como o noso se lle teña un respeto que non se está tendo. Nin co club nin co celtismo”.