Atlántico
Gaza: ¿Olvidada?
Sus consecuencias las estamos viviendo a nivel mundial. Escucha Hugo en pleno siglo XXI, es muy difícil, por no decir imposible, un gobierno comunista, sin ir a elecciones. Lo que Chávez sorprendido le preguntó ¿Y si se pierden? ¡Se manipulan y se ganan, no hay otra hockey! Aquella fatídica conversación, marcaría el final de unas elecciones libres en Venezuela.
Esta maldita conjura irracional y perversa que ya recorre hoy buena parte del Mundo Occidental, y amenaza seriamente a todos los países democráticos, ya hizo sus efectos desgraciados en Venezuela en varias ocasiones. Se repite hoy en los EE.UU. y seguirá su camino destructor. Sus actuaciones y manipulaciones, son idénticas y cuentan además con la colaboración puntual, cómplice y efectiva de ciertos medios de comunicación que siguen también al pie de la letra lo afirmado en aquel primer congreso de periodistas de izquierdas, celebrado en Chile en 1971, organizado y dirigido por Salvador Allende: La objetividad no debería existir en el periodismo mundial, porque el supremo deber del periodista de izquierdas no es servir a la verdad, sino a la revolución.
Lo que hoy ya estamos viviendo es una realidad contrastable y la punta del iceberg de una descomposición social que atosigará a toda la humanidad, destruyéndole sus valores y principios morales y éticos, para introducirnos obligatoriamente en este mundo ficticio y confuso de su progresismo globalizante, dónde y cómo decía Campoamor: Nada es verdad o mentira, tan solo será igual al color del cristal con que se mire. Este entramado de confusión y engaño, puesto en marcha por los enemigos de nuestra patria, que hoy nos desgobiernan, no tienen desperdicio alguno, por su disparatada composición socialista, comunista, separatistas, golpistas, terroristas convictos y confesos y anarquistas que, conjuntamente con mafias de todos los colores y sabores, que son una bomba de profundidad destructora para la convivencia ciudadana y la familia, que tiene su puntas de lanza hoy en esta invasión de indocumentados violentos, financiados y protegidos por el mismo Gobierno, pretendiendo camuflarlos como emigrantes legales. Los hechos sucedidos en Canarias, son la evidencia de sus complicidades, con servicio incluido de catering, fiesta rachada y hotel de lujo. Lo lamentable esa observar a una institución como Cruz Roja, ayudando a este disparate y ofensa a toda España. Lo nunca visto en mis cincuenta años de emigrante legal por el mundo, Venezuela hoy ya está pagando con creces aquel desbarajusta social vivido y creado por los indocumentados que terminaron, no solo invadiendo el país, también corrompiendo a sus cuerpos y fuerzas de seguridad y convirtiendo a la vez a sus FF.AA. en ONGs a su servicio, al comprar Maduro su silencio, con un bozal de oro y petróleo y dejando en la orfandad al pueblo de Venezuela.
El español consciente y preocupado, debe hacerse esta pregunta hoy: ¿Para qué sirven nuestras FF.AA. hoy, cuando está en peligro la integridad de la patrias y nuestra seguridad? Mientras a estas las tenemos hoy desplegadas por todos los confines del mundo y cuidando fronteras ajenas, mientras las nuestras son violadas descaradamente y no pasa nada. Cuentan con la pasividad del Gobierno actual, y el silencio cómplice de casi toda la oposición, solo Vox está levantando la voz y exigiendo responsabilidades, y a coro incondicionalmente los cómplices de este desbarajuste, los tildan de xenófobos, racistas y fascistas de la extrema derecha franquista, que está en contra de la emigración. Aquí está el camuflaje obsceno y cobarde que utilizan al catalogar a vulgares invasores indocumentados y violentos como emigrantes. Es todo un sainete cínico y blanqueador, para su oscuro acopio ideológico y electoral. Lo decía un líder latinoamericano: El problema de toda América es que quienes eligen a sus gobernantes no son quienes leen los periódicos, sino los que se limpian el culo con ellos. No hay mejor aliado para un dictador que un pueblo oprimido, cobarde, hambriento y conformista. Escojamos el que mas nos convenga, para entrar en ese círculo disgregador y confuso que hoy nos están ofreciendo.
Contenido patrocinado
También te puede interesar
Lo último