Sigue creciendo el registro: ya hay tantos perros como menores de 20 años censados y el total de mascotas supera las 55.000
El censo humano se ha estancado o incluso baja en Vigo, pero, en cambio, el registro canino parece imparable. Es imparable. No hay más que echar un vistazo a las cifras, cada vez más espectaculares. A principios de este año, el pasado mes de enero, había 46.237 perros inscritos en el Rexistro Galego de Indentificación de Animais de Compañía (Rexiaca), de la Consellería de Medio Ambiente, marcando el tope histórico. Que duró poco. En verano, ya eran 47.321. Y el año finaliza con otra marca histórica, un total de 48.094, lo que significa que en apenas once meses ha crecido el registro en un 5 por ciento más, cuando parecía que no había ya margen para crecer. No ha sido así: son medio millar más que hace un año (eran 45.800) y un 50 por ciento más que hace tan solo diez años. Y no paran de aumentar, rumbo a los 50.000, una barrera que parece cada vez más cerca. Hay además de los 48.094 canes otros 7.000 animales inscritos en el registro (hasta un total de 55.385 a día de hoy), donde pueden incluirse todo tipo de mascotas, incluyendo gatos, si bien su censo real está muy lejos del oficial.
También continúa incrementando unidades el apartado específico de las razas peligrosas, y de forma aún más notable. Según el mismo registro, habría ahora mismo 2.199 en dicha consideración, lo que supone un incremento espectacular: un 45 por ciento más que el pasado año, en que había 1.430 registrados. Por tanto, casi el cinco por ciento de los perros son potencialmente peligrosos por sus características Y la lista también sigue aumentando.
El Rexiac va de récord en récord. ¿Hasta cuándo? No parece que vaya a ser pronto: durante la pandemia subió el total en algo más del 30 por ciento con respecto a 2020 hasta llegar a los números actuales: en Vigo hay un perro por cada seis habitantes. De momento, todo apunta a que seguirá hacia arriba, pese a que las normas animalistas aprobadas recientemente hacen más complicado tener una mascota, entre otras cosas por los límites fijados: prohibición de llevarlos sueltos o incluso amenaza de multa por tenerlos a la puerta de una panadería, aunque sea un minuto, al menos en teoría.
En Vigo hay playas específicas, espacios propios en los parques, cada vez más servicios sanitarios y salones de belleza e incluso bares que les sirven tapas, si bien hay más dificultades para comprar una mascota. Parece un terreno abonado para que la colonia canina se expanda, en especial a través de la fórmula de la adopción. En la protectora Os Biosbardos indican que a día de hoy hay 40 perros esperando por un dueño. Su portavoz reconoce que en los últimos meses bajaron un poco las adopciones, pero de forma poco significativa por lo que en términos generales se mantiene el ritmo anual. “Estamos casi en los mismos números que el año pasado y llevamos hasta el momento 216 perros adoptados y además otros 215 gatos”, indican.
Los últimos datos de adopción animal en España, según un estudio de la 'Fundación Affinity', resultan espectaculares. Durante 2021 se recogieron 285.000 perros y gatos por protectoras en España, más o menos la misma cantidad que en 2020, de los cuales se adoptaron un 52% y un 51% de perros y gatos, respectivamente. Según la nueva ley, en el capítulo de "Cría, comercio, identificación y transmisión de animales en compañía" se encuentran nueve puntos que regularizan este acto. Un animal de compañía se considerará como tal si un "animal doméstico o silvestre en cautividad, mantenido por el ser humano" no se utilice con fin de aprovechar sus capacidades para fines lucrativos (industriales, comerciales, etc.). Además, la ley establecería que "en todo caso perros, gatos y hurones, independientemente del fin al que se destinen o del lugar en el que habiten o del que procedan, serán considerados animales de compañía".
La comparación entre mascotas, al alza, y niños, muy a la baja, se ha convertido en un clásico como dos polos de un mismo fenómeno que tendría derivadas sociológicas y económicas, si bien los propietarios de mascotas desvinculan en general una cosa y la otra. Pero la estadística está ahí: en la actualidad hay en Vigo apenas 48.000 jóvenes y niños menores de 20 años, menos que canes. Y todavía son muchos menos si se acota a los menores de 16 años, que llegan a 38.000, es decir ya hay una distancia de 10.000. La natalidad en total retroceso va a seguir incrementando las distancias: este año con toda probabilidad se va a batir una nueva marca negativa en cuanto al número de niños nacidos en el área sanitaria viguesa, que se corresponde con todo el sur de la provincia y un total de 27 ayuntamientos.
