DE VISITA A SAN SIMÓN

El puente en la isla que era frontera entre la vida y la muerte

El puente/frontera entre el lazareto limpio y el “sucio”: la comida se dejaba en el medio.
photo_camera El puente/frontera entre el lazareto limpio y el “sucio”: la comida se dejaba en el medio.
La isla funcionó hasta hace un siglo como punto obligado de entrada a España, y Vigo de Puerta del Atlántico

Lo más famoso de la larga historia de la pequeña isla, y que dio fama a San Simón, fue cuando el empresario Velázquez Moreno, en colaboración el médico Taboada Leal, lograron permiso del Gobierno adelantando el dinero para poner en marcha el centro de cuarentena, conocido como lazareto, aunque no lo era exactamente. Funcionó desde los años treinta del siglo XIX hasta hace un siglo, cuando las técnicas médicas ya no hacían necesario pasar cuarentenas. Supuso el mayor impulso al puerto de Vigo: la totalidad de barcos que llegaban desde América tenían que pasar 40 días en los hoteles de la isla. Eso significaba mucha riqueza: víveres, reparaciones y toda una industria. Y para Vigo convertirse en Puerta del Atlántico, su mejor lema. Se estima que entre 1842 y 1854 llegaron más de 2.300 embarcaciones con unos ingresos a la Hacienda pública de medio millón de reales. De esta manera el puerto vigués pasó a ser el favorito de muchas compañías de navegación.  La mayoría de los recién llegados al lazareto limpio pasaban unos días en el hotel y seguían camino, salvo los enfermos, que eran enviados a la isla de San Antón, el lazareto “sucio”, comunicado con un puente que servía para pasar comida y también de frontera infranqueable entre la vida y la muerte. En esta parte hay un cementerio con algunos entierros, los de trabajadores. Y también un paredón siniestro, donde hubo al menos dos fusilamientos cuando San Simón se convirtió, entre 1937 y 1942, en prisión durante la Guerra civil y el inicio del franquismo. Hasta 2.000 presos llegaron a estar hacinados, falleciendo por hambre y enfermedades un tercio de todos los que estuvieron por el presidio, unos 6.000. Pero las penas de muerte no se cumplían en la isla, sino en tierra. No obstante,  el muro del cementerio impresiona.

El antiguo hospital del lazareto “sucio”.
El antiguo hospital del lazareto “sucio”.

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