El noveno piso de la avenida de Castrelos donde el jueves un detenido se lanzó desde la ventana poniendo fin a su vida fue ayer objeto de un nuevo registro en presencia de la mujer de la víctima y también detenida. Agentes de la Ucrif (Unidad Central de Redes de Imigración Ilegal) junto con los abogados y la letrada de la Administración de Justicia regresaron a la vivienda para finalizar lo que el día anterior quedó pendiente tras el sorpresivo suicidio del arrestado.
La investigación, que se encuentra bajo secreto de sumario, se centra ahora en examinar el contenido del ordenador intervenido en la casa, donde vivía la pareja con su hija. En el disco duro podrían encontrarse imágenes que corroborarían la versión de la denunciante, una ciudadana sudamericana que acudió a Comisaría unos veinte días después de escapar del inmueble donde aseguró la tenían retenida y obligaban, entre otras cosas, a realizar las tareas en tanga y camiseta. Según la investigación, la denunciante estaría especialmente atemorizada por lo que le pudiera pasar a su familia si hablaba con la Policía. El paso de los días, no obstante, hizo que los investigados descartaran esa posibilidad.
Lo que la mujer habría relatado describiría otro tipo de actuaciones dirigidas al comercio sexual a lo que ella se habría negado. Los hechos están siendo investigados por delitos contra la libertad sexual, detención ilegal y revelación de secretos, pero no se descarta que detrás hubiera además un posible caso de trata de mujeres pues habría conexión con otra denuncia reciente de una compatriota que llegó a Vigo tras pagar 2.000 euros.
El fallecido, de 35 años, llevaba unos cinco años viviendo con esta pareja, una mujer de origen sudamericano, en la avenida de Castrelos, pero había tenido una relación anterior.
El juzgado abrirá una investigación para determinar las circunstancias en las que se produjo su muerte, durante un registro, cuando de forma sorpresiva y sin dar tiempo de reacción a los agentes se tiró por la ventana.
Por su parte, la mujer, que fue trasladada por un ataque de nervios al hospital, continúa detenida y se prevé que pueda pasar a disposición del juzgado en las próximas horas. n
