Los pisos de uso turístico en Vigo se expanden a las parroquias y rozan ya los 2.000
Turismo
Los barrios más costeros como Navia, Alcabre o Saiáns, lugar de proliferación de estos hogares vacacionales por delante de zonas del interior; se crearon dos al día en el último mes
Los pisos turísticos en la ciudad siguen al alza y se acercan a las 2.000 viviendas. En julio se batió otro récord histórico y se superó la barrera de los 1.850. Concretamente 1.853. Esto supone que en junio se han sumado al alquiler vacacional más de dos viviendas diarias debido que en el último registro realizado en junio las cifras indicaban un total de 1.792 pisos turísticos en Vigo. Un fenómeno que, lejos de aglutinarse en la zona centro, se está expandiendo a las parroquias limítrofes. Especialmente en la costa, donde Navia, Alcabre, Saiáns y Oia ofertan un total de 58 viviendas de uso turístico (VUT). Estas cifras no superan a las registradas en calles más céntricas como Rosalía de Castro, la ‘milla de oro’ del alquiler vacacional en Vigo, que rozan los 70 hogares.
Otras parroquias, como Beade, Valladares o Sárdoma también se unieron al ‘boom’ turístico, pese a la lejanía de la zona centro. La parroquia Beadense cuenta con dos hogares de este estilo, uno situado en la calle principal Ramiro Pascual, Sárdoma también cuenta con dos, y tres en Valladares, dos de ellas en un mismo edificio de la calle Regueiro. La Entidad Menor de Bembrive ya cuenta con 4 VUT.
En el barrio de Teis, más industrial y destinado a viviendas de uso particular, ya surgieron un total de 12 viviendas vacacionales en calles como la Avenida de Buenos Aires, Rúa Espiñeiro o Rúa Rorís. Un uso diferente, enfocado a un usuario que busca alejarse del centro y del ruido. Estas se suman a las 17 que ya se encuentran en el entorno de Sanjurjo Badía, lo que disparó la afluencia de turismo en la zona. Sin embargo, son menos las que cuentan con su ubicación a las afueras y lejos de las zonas de costa. La zona centro sigue siendo donde más existen, seguidos de las viviendas cercana a la playa y, por último las parroquias, menos turísticas. Candeán, por ejemplo, ya cuenta con 4, mientras que en Cabral ascienden a 7.
Cada vez son más las viviendas de uso vacacional que se contabilizan en Vigo. Según apuntan desde la Federación Galega de Empresas Inmobiliarias (Fegein) la tendencia seguirá siendo alcista, al menos durante todo el verano, hasta superar los 2.000. En julio ya se superó la barrera de las 4.000 habitaciones disponibles (4.099) y las 8.000 plazas (8.212). Récord histórico. Hace cinco años, las habitaciones todavía se encontraban lejos de las 1.000, concretamente 733, y había disponibles 1.138 plazas, ocho veces menos que en la actualidad.
Los perjudicados de esta proliferación son los hoteles. Actualmente cuenta con menos peso a la hora de competir contra estos alojamientos, con un 40% menos de plazas y habitaciones a ofertar. En julio, los hoteles desde 1 a 5 estrellas cuentan con 2.846 habitaciones y algo menos de 5.000 plazas. Las pensiones, otra alternativa para el alojamiento vacacional aunque menos enfocada a ello, tan solo cuentan en la ciudad con 406 habitaciones y 673 plazas disponibles.
Más vivienda de alquiler vacacional en Vigo que locales de restauración
El aumento de pisos turísticos llegó a un nivel en el que superó a los locales de restauración de la ciudad. Con 1.852, ya se registran más que cafeterías y restaurantes juntos, con 1.846, según el último registro del Registro de Empresas y Actividades Turísticas (REAT). Las tendencias en los pisos turísticos y en cafeterías son inversas, aunque pueden tener una relación debido al turismo que arrastran los locales de restauración. Antes de pandemia, las viviendas vacacionales pasaron de 423 establecimientos en la ciudad a 1.853. Esto es un aumento del 438% en solo cuatro años. En el mismo baremo de tiempo se contabilizaban 2.208 locales de restauración, cayendo hasta los actuales 1.846. Una bajada del 17%.
La pandemia, si bien produjo en el turismo un parón del cuál se recuperó en la ciudad, la restauración sufrió un duro golpe con sus cierres de forma temporal. Tanto que en un plazo de cuatro meses vieron cerrar su verja de manera definitiva hasta 300 bares, cafeterías y restaurantes. El fuerte paquete de ayudas públicas a hostelería y otros negocios afectados por el covid consiguió reducir la sangría de locales en este tiempo.
Los primeros registros de los VUT se produjeron en junio del 2017. Ahí tan solo había 15 establecimientos, 38 habitaciones y 53 plazas disponibles para usuarios. Tras ello, la cifra fue aumentando de manera progresiva y ni el covid fue capaz de parar esa ascensión. De hecho, en junio del 2020 se encontraban registrados pese a la falta de turismo un total de 461 viviendas de uso turístico. Esto hizo que durante la etapa más dura del confinamiento los hogares vacacionales aumentaron en 38.
Vigo, con mismos VUT que A Coruña, Ourense y Lugo
La cantidad de pisos turísticos que afloran en Vigo lo colocan, con diferencia, a la cabeza entre las ciudades gallegas. De hecho, los 1.853 VUT son prácticamente los mismos registros que se contabilizan en A Coruña, Lugo y Ourense juntas. La ciudad herculina, más acostumbrada al turismo que las otras dos, cuentan con 1.326 viviendas vacacionales. Ourense registra 397 y, Lugo, 293. Esto hace un total de 2.016.
Estos establecimientos han llegado también al área metropolitana. Lugares como Baiona, Cangas, Moaña o Nigrán ya superan cada uno la barrera de los 200 alquileres turísticos en unos municipios costeros que aumentan su afluencia en verano. Cangas cuenta con 671 VUT, Baiona, con 439. Nigrán contabiliza en el REAT 344 viviendas, mientras que Moaña tiene actualmente 223.
Otros municipios de la costa, menos turísticos, también cuentan con esta alternativa vacacional. A Guarda cuenta con 174, y Santa María de Oia u O Rosal tienen, cada uno, 51 pisos turísticos.
El interior es menos recurrido para el turista pero, aún así, lucen algunos. Mos tiene 17 establecimientos, Gondomar cuenta con 79 y, Redondela, con 161. La confluencia de Camiños de Santiago en el municipio redondelano ha ayudado a que el turismo sea uno de los motores económicos del lugar.
Contenido patrocinado
También te puede interesar