El hasta ahora responsable de Sanidade es la baja más significativa del nuevo Gobierno de la Xunta
En el primer Gobierno gallego con sello 100% de Rueda la única salida importante tras la ya conocida de Ethel Vázquez ha sido la de Julio García Comesaña, acompañada de una reordenación de algunos departamentos y la supresión de las dos vicepresidencias, lo que deja varias consideraciones. Lo de Comesaña resulta especialmente raro -no había ningún motivo conocido en su gestión para su salida de la Consellería de Sanidade, salvo que él la pidiera para quedarse en el Parlamento como diputado- y además deja a Vigo sin cuota, lo que también tiene varias lecturas, y ninguna favorable.
Entre otras cosas, sonaba en el PP vigués como posible presidente, y para eso nada mejor que contar con un altavoz. Se daba por probable su salida de Sanidad, pero hacia otra consellería con un perfil más político y de gestión ciudadana, como Infraestructuras. No ha sido así y eso, en principio, reduce sus hipotéticas expectativas políticas, si las había. Su entrada en la Consellería se produjo tras la marcha de Almuiña, luego presidente del Puerto vigués, y tras ocupar antes responsabilidades en las áreas sanitarias de Vigo y Ourense. En su entorno se destacaba ayer que Comesaña estaba volcado y muy a gusto con su trabajo y que ahora “toca otra cosa”.
Curiosamente, el único vecino de Vigo en la cúpula de la Xunta es ahora José González Vázquez, que pasa de Medio Rural a Empleo, pero que consume cuota por Ourense, provincia de la que es diputado, como también Miguel Santalices, parlamentario ourensano “que vengo a dormir a Vigo”. La de González Vázquez también fue una buena gestión, el pasado verano ningún incendio forestal en la provincia, que ha resultado premiada. Por otra parte, Benito Iglesias, presidente de Fegein (la federación inmobiliaria), emitió un comunicado donde muestra su apoyo sin fisuras y colaboración total con la nueva conselleira de Vivenda, María Martínez Allegue. Iglesias puso en valor “su conocimiento de la realidad de la necesidad de la vivienda de protección oficial y su capacidad para abordar el reto de la problemactica de la accesibilidad a las familias más vulnerables y los jóvenes”.
