El diagnóstico de la enfermedad de Alzhéimer se basaba hasta hace poco en los síntomas, que son compartidos con otras demencias, pero ahora se basa en los datos de biomarcadores
El Laboratorio de Análisis Clínicos del área sanitaria de Vigo realiza de manera rutinaria pruebas que permiten diagnosticar o descartar la enfermedad de Alzhéimer en un paciente utilizando biomarcadores. Una de ellas se hace con líquido cefalorraquídeo que se obtiene con una punción lumbar y la otra prueba es un análisis de sangre.
Se ocupa de esto el área de conocimiento de Neurología del Laboratorio, que colabora estrechamente con la Unidad de Demencias creada en septiembre de 2022 en el área sanitaria de Vigo.
El diagnóstico del Alzhéimer se basaba hasta hace poco en los síntomas, que son compartidos con otras demencias y esto lo hacía más difícil, pero desde hace casi dos años la posibilidad de realizar estas pruebas en Vigo marcó la diferencia. Ahora el diagnóstico se apoya en datos y además se puede realizar en las fases iniciales de la enfermedad, con las ventajas que supone para el paciente.
El médico especialista en Análisis Clínicos, José Manuel Martínez Yriarte, asegura que es un trabajo en equipo, tanto del Laboratorio como de la Unidad de Demencias, respaldado por la dirección, y destaca que la punción lumbar se hace con los criterios de calidad internacionales, por lo que sus resultados son “robustos y fiables”. Admás, tienen el compromiso de entregar los resultados en un plazo de quince días.
La investigación básica descubrió estos biomarcadores y en un segundo escalón los clínicos vieron que funcionaban en la práctica asistencial. La Alzheimer's Association, una entidad sin ánimo de lucro estadounidense, fue la que se ocupó de poner en marcha procesos de validación internacional para estos biomarcadores y Vigo los cumple a rajatabla, desde la forma de tratar la muestra, los contenedores que se usan y la interpretación de los resultados.
Con la punción lumbar se realizan tres determinaciones para tres biomarcadores que analizan las proteínas beta amiloide, tau fosforilada y tau total. Con esos tres resultados, que pueden ser positivos o negativos, se elabora el informe.
La prueba en sangre no está tan validada como la de líquido cefalorraquídeo y por tanto no tiene el mismo estándar de calidad, pero Vigo la ofrece como alternativa y es de los pocos que lo hacen en España. Se usa por ejemplo en pacientes que no reúnen las condiciones para una punción lumbar o porque les da miedo esta prueba. Yriarte espera que en el futuro se pueda validar y extender su uso.Actualmente se intenta ver qué biomarcador es más eficiente en plasma. Se examina la tau fosforilada y se realiza en concreto en el aminoácido 181, pero se está viendo a nivel mundial que hay mejores resultados con el 217. En Vigo están en vías de cambiar a esta segunda proteína.
Actualmente la Agencia Europea del Medicamento (EMA) analiza una terapia que ralentiza un 30% la evolución de la enfermedad en casos de deterioro cognitivo leve o medio. Estados Unidos ya la aprobó. El requisito es estar en esos estadios iniciales y para eso es crucial la prueba con biomarcadores.
