Diseñar, programar y volar un sistema sobre un dron para ayudar a limpiar los océanos. Ese fue el reto que tuvieron que superar los más de 180 estudiantes participantes de la 2ª Liga Maker Drone, impulsada por la Fundación Barrié y la Fundación Instituto Tecnológico de Galicia (ITG), cuya jornada de exhibición y gran final tuvo lugar ayer en A Coruña. Allí un centro vigués, el IES Carlos Casares, se hizo con uno de los premios, el de la solución más disruptiva. Los otros dos centros vigueses que participaron, el IES San Tomé y el CPR Las Acacias, finalmente no lograron un galardón.
El equipo ganador fue el del CPR Nuestra Señora del Carmen, de Betanzos, que consiguió llevar a cabo la misión en el menor tiempo. Otros tres centros educativos también vieron reconocida su labor: el CPR Divina Pastora, de Ourense, con el mejor diseño; el IES de Ames, que logró el premio a la destreza en vuelo; y el CPR Montespiño, de A Coruña, con el premio a la mejor presentación.
Así, a lo largo de la mañana, los más de 180 estudiantes de 2º ESO demostraron las competencias y habilidades STEM (Ciencias, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas) adquiridas a lo largo del curso escolar gracias a su participación en esta competición, una iniciativa que tiene como fin último el fomento de las vocaciones científico-tecnológicas de las nuevas generaciones.n