La investigación judicial sobre la paliza a dos jóvenes vigueses en enero pasado en una calle de Hernán Cortés ha finalizado. Tras ocho meses de instrucción, el Juzgado número 8 de Vigo ha dictado un auto de transformación en Procedimiento Abreviado en el que considera que hay indicios de delito en la actuación de los dos investigados, dos futbolistas de Ourense. Así, aprecia un delito de lesiones con deformidad, que podría llevar aparejadas penas de entre tres a seis años de prisión y otro leve de lesiones.
Según se recoge en dicho auto, de las diligencias practicadas se desprenden indicios que apuntan a que sobre las cinco de la madrugada del pasado 30 de enero los dos sospechosos, Gregorio G. y Adrián S. se encontraron en la calle con las víctimas, comenzando una discusión que desembocó en una agresión por parte de los investigados lo que provocó que uno de los jóvenes se desplomara perdiendo el conocimiento.
A continuación, sostiene el escrito que Gregorio G., estando presente Adrián “que no hizo nada para evitarlo”, se dirigió al otro joven al que propinó un puñetazo que le hizo caer al suelo. Después, y dado que el herido se encontraba protegido por un viandante se acercó a éste haciéndole creer que iba a pedirle disculpas por lo ocurrido, "ocasión que fue aprovechada para propinarle una brutal patada en el rostro.
Para el juez la participación de los dos investigados se desprende en la identificación de un testigo protegido partiendo de la grabación de los hechos. Sostiene que dicha identificación se encuentra corroborada indiciariamente de los datos objetivos como son la localización y tráfico de llamadas de los teléfonos de los detenidos y que les sitúan en la hora y fecha en el lugar de la agresión y constata tres contactos entre ellos. Añade las características físicas que coinciden con la de las imágenes grabadas y un audio en el que se llega a escuchar a Gregorio refiriéndose a su acompañante como “Adri”.
Aunque de los dos hay uno que protagoniza la agresión más grave, entiende el auto que la participación del segundo pudiera serle imputable como coautor por el hecho de crearse un vínculo de solidaridad que conlleva la imputación recíproca.
Considera que podría tratarse de un delito de lesiones con deformidad, ya que uno de los jóvenes perdió varias piezas dentales. Este sufrió además fractura de los huesos de la nariz, policontusiones y traumatismo cervical y estuvo ingresado en el hospital.
El auto judicial dispone la tramitación de la causa en procedimiento abreviado dando traslado al Ministerio Fiscal y a las acusaciones particulares para que o bien soliciten la apertura de juicio oral formulando escrito de acusación o el archivo de la misma, así como excepcionalmente, la práctica de diligencias complementarias.
La decisión del juzgado ya ha sido recurrida por una de las partes personadas.
