Los inquilinos a desalojar en Vigo piden más tiempo

Más de 24 horas después de que el Concello ordenase el desalojo de los edificios situados en los números 11 y 13 de la calle Fisterra, los inquilinos de estos dos inmuebles todavía permanecían en sus casas con numerosas dudas e incertidumbre.

Según reconocen varios vecinos del edificio número 11, la noticia les llegó por sorpresa, ya que no esperaban una decisión así por el estado del edificio, que según reconocen es antiguo, pero consideran que no supone un riesgo. Gran parte de sus inquilinos son gente mayor que lleva residiendo en el inmueble desde hace tiempo. “Mi vida entera está aquí”, asegura Remedios, que vive en el número 11 desde hace una década.

Aseguran que por el momento no han sido notificados de ninguna fecha límite para abandonar sus hogares y piden que el desalojo no sea inmediato para poder retirar sus enseres en el caso de ser necesario. “No es justo que se haga esto de la noche a la mañana”, afirma Mari Carmen, vecina del mismo edificio.

Apuntan a que la situación sería muy diferente entre los dos edificios sobre los que se ordenó el desalojo y señalan al número 13 como el principal foco de problemas en la zona, donde según Remedios eran habituales las visitas de la Policía que achaca principalmente a problemas de drogas.

En el interior del número 13 de la calle, la instalación eléctrica, la causa que propició la orden del desalojo del Concello, muestra una situación más descuidada con un gran número de cables al descubierto. En el exterior, el portal del número 13 permanece abierto la mayor parte del tiempo, a diferencia del inmueble que se encuentra a su lado.

Los residentes de ambos inmuebles aseguran contar con contratos de alquiler, aunque este arrendamiento se produciría por habitaciones. A la puerta de uno de los portales hay un cartel de la propiedad que prohíbe las visitas más tarde de las 10 de la noche, lo que parece indicar que estos edificios podrían estar siendo gestionados como si se tratara de un hostal.

Desde el Concello señalaron que el desalojo se realizará de forma progresiva y afirmaran que se darían ayudas a los residentes para trasladar sus cosas fuera del edificio y atender a sus mascotas, aunque los vecinos de la zona aseguran que todavía no fueron informados.