Un estudio recién publicado en la revista Marine Pollution Bulletin encontró microplásticos en las cuatro especies analizadas de la plataforma continental del Noroeste Ibérico: sardina, anchoa, salmonete y dragoncillo. El equpo co-liderado por los investigadores Jesús Gago del Centro Oceanográfico de Vigo e Izaskun Preciado del Centro Oceanográfico de Santander junto a la participación de Ana Virginia Filgueiras y Ana Cartón, evaluó la incidencia de microplásticos en el contenido del tracto digestivo.
En concreto, estudiaron el contenido estomacal de 64 individuos de las cuatro especies de peces seleccionadas, aislando 100 microplásticos: 25 en anchoas, 23 en sardinas, 14 en salmonetes y 38 en dragoncillos. Se han identificado dos tipos de microplásticos: fibras (88%) y fragmentos (12%), siendo los colores más abundantes el transparente en anchoa y sardina, y el azul en salmonete y dragoncillo. Todas las especies presentaban microplásticos en porcentajes que varían del 60 % para el salmonete al 87% para la anchoa y la sardina. El polietileno y el polipropileno fueron los polímeros más abundantes, tal y como era de esperar debido a que son dos de los más utilizados, principalmente como material de embalaje.
La dieta de las especies es un factor determinante en la transmisión de muchos contaminantes a través de la red trófica por lo que, con el fin de estudiar si en el caso de los microplásticos sucede lo mismo, se analizó el contenido estomacal de 787 peces. Se observaron dos formas de alimentación distinta: planctívoros (peces que se alimentan de plancton) y bentívoros (se alimentan de pequeños organismos del fondo marino). Se analizó la influencia del tipo de alimentación junto con otras variables (longitud del individuo, volumen del contenido estomacal) en el número y tamaño de microplásticos ingeridos. La talla de los individuos y su condición corporal explican los cambios en la cantidad y tamaño de los microplásticos ingeridos. Una posible explicación puede ser el alto nivel de microplásticos tanto en la columna de agua como en el fondo marino.
El Puerto absorberá más CO2 del que emite a partir del año 2030
El Puerto de Vigo dará un paso adelante en la estrategia Blue Growth en diciembre con el compromiso de ser sumidero de CO2 en 2030, con motivo de la celebración de una nueva edición de la Conferencia “Our Ocean” organizada por la Unión Europea.
El Puerto se comprometerá así a absorber más CO2 del que emite a diez años vista, con lo que aspira a convertirse en un agente activo en la lucha contra el cambio climático, marcando el camino a seguir en la defensa del medioambiente a otras instituciones y organismos a nivel mundial, como ya hizo en 2017, cuando fue el primer puerto del mundo en presentar, en la última edición de esta conferencia, celebrada en Malta en el mes de octubre, su compromiso en la reducción de un 30% de sus emisiones (CO2, SOX, NOX) y la autosuficiencia energética del 3% para el año 2022.
Para lograrlo, se propuso adoptar medidas que fomentaran el uso de GNL y la aplicación de acciones innovadoras relativas a la absorción de CO2 por parte de las algas, apoyar la aplicación del pleno autoabastecimiento con energías limpias para el Parque Nacional de las Islas Atlánticas como proyecto piloto y realizar actividades para la sensibilización y formación de al menos 1.000 usuarios del Puerto de Vigo (incluidas todas las actividades) acerca de la necesidad de una energía limpia y azul.
Tres años después de que el comisario Karmenu Vella hiciera oficial el compromiso del Puerto de Vigo, está a punto de lograr su objetivo. Aunque su compromiso energético había fijado como horizonte el año 2022, ya ha logrado reducir en un 26% sus emisiones en términos totales. Esta cifra, recogida en un informe de seguimiento del compromiso con fecha de diciembre de 2019, da prácticamente por cumplido el objetivo portuario. La Autoridad Portuaria confía en que, con la instalación de los paneles solares en la Lonja se daría por cumplido totalmente su compromiso inicial: la reducción del 30% de sus emisiones totales y la autosuficiencia energética del 3%. El Puerto señala que propone un nuevo modelo, un “Puerto del Futuro” en términos de personas y medio ambiente "inclusivo, innovador, conectado y verde".
