JUAN CARLOS ARIAS CASTAÑO Jefe de Cardiología del Hospital Povisa

JUAN CARLOS ARIAS CASTAÑO: “Debemos educar a los niños en una vida sana, dejar como herencia la salud es mejor que dejar dinero”

El cardiólogo Juan Carlos Arias, en el Hospital Povisa.
photo_camera El cardiólogo Juan Carlos Arias, en el Hospital Povisa.

Las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de muerte en España. ¿Ocurre lo mismo en nuestra área?
Sí. Al igual que en el resto del mundo occidental, Europa y España, en Galicia las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de muerte. aAproximadamente la tercera parte de las personas mueren por estas enfermedades.

¿Cuáles son las más frecuentes?
Las enfermedades de los vasos del corazón o enfermedades coronarias (angina e infarto) y las enfermedades de los vasos del cerebro (ictus).

¿Las enfermedades cardiovasculares van en aumento? ¿Cuál es la tendencia?
La mortalidad por enfermedades cardiovasculares disminuye lenta pero progresivamente en los últimos treinta años, gracias sobre todo a los avances en su tratamiento y, en parte también, por las mejoras en la prevención. Crece sin embargo la insuficiencia cardiaca (una enfermedades que consiste en que el corazón no es capaz de hacer su trabajo correctamente). Esto se debe a que cada vez vivimos más y que gracias a los tratamientos cada vez se sobrevive más a las enfermedades del corazón. Como consecuencia cada vez hay más personas con el corazón viejo o enfermo.

¿En qué medida podríamos evitar estas enfermedades? ¿Qué hacemos mal?
Que las paredes de los vasos de corazón y cerebro vayan envejeciendo con el paso de los años es natural. Es el proceso llamado aterosclerosis. Y la posibilidad de que en algún momento se inestabilice y se produzca un infarto o un ictus, es seguramente inevitable. Pero lo que podemos reducir, y mucho, es la probabilidad de que esto suceda. Y lo podemos hacer controlando los factores que aumentan la probabilidad de la enfermedad (factores de riesgo cardiovascular).

¿Cree que en general la población no se toma en serio factores de riesgo como el colesterol, la hipertensión o el sobrepeso?¿Cuál de los factores de riesgo tiene más peso en estas patologías?
Los factores de riesgo cardiovascular modificables más importantes son cuatro: el tabaco, el colesterol, la hipertensión y la diabetes. Después hay otros que tiene importancia, bien porque actúan directamente produciendo la enfermedad o sobre sus factores de riesgo. Son la obesidad, el sedentarismo, el estrés... La población en general conoce estos factores, pero les presta poca atención cuando ve la enfermedad lejos y empieza a preocuparse cuando ya tiene la enfermedad. Lo interesante sería evitar el daño ya desde la infancia.

El tabaco se sabe que guarda relación directa con una docena de cánceres. ¿En este caso caso también afecta?
 Por supuesto, afecta y mucho. Se ha calculado que dejar de fumar es la medida más beneficiosa tras haber tenido un infarto. Más incluso que los tratamientos farmacológicos o de revascularización percutánea o quirúrgica.
 

¿También influye el estrés?
Sí. Un poco. Pero no nos engañemos, es mucho más el daño que hace fumar para superar el estrés, que estar estresado y no fumar. Lo digo porque este es un argumento que con frecuencia utilizan los fumadores para no abandonar el tabaquismo . 

¿Qué avances destacaría en el tratamiento, por ejemplo cuestiones como el protocolo de ictus y otros procedimientos o técnicas que hayan podido mejorar el pronóstico de los pacientes?
Cuando se obstruye una arteria y deja sin riego una parte del corazón o del cerebro, se inicia una carrera contrarreloj para tratar de disminuir el daño irreversible o incluso la muerte. Los programas para atención rápida del infarto de miocardio están establecidos desde hace años (Galicia fue pionera), y para atención del ictus se han establecido en los últimos años y son una parte fundamental de la atención de estas enfermedades. Pero ¿es mejor reparar el pinchazo o evitarlo quitando los clavos de la carretera? Sin duda la segunda opción es mejor. En este sentido los tratamientos preventivos, y en especial el tratamiento del colesterol, son los que nos han dado más alegrías.
 

¿Una persona que tiene un infarto o un ictus inevitablemente tendrá un segundo episodio?
Esto es como preguntarse si alguien que ha tenido un accidente con el coche inevitablemente tendrá otro. Al igual que si tienes un accidente porque conduces borracho y de forma imprudente es muy probable que vuelvas a tener otro accidente si continúas haciendo lo mismo, si tienes un infarto porque fumas y no te controlas el colesterol, es muy probable que tengas otro si no cambias tus hábitos.

¿Qué consejos daría a la población para que se cuide mejor?
 No fumar. Se ahorra dinero, se vive más y mejor. Es incuestionable y no precisa más explicaciones. Control de los factores de riesgo cardiovascular por su médico de atención primaria. Los médicos tenemos unas fórmulas o tablas con las que podemos calcular el riesgo de forma individual y hacer recomendaciones específicas para cada persona. No valen las recomendaciones de la vecina ni las de los anuncios de margarina, por mucho que pongan que se basan en sociedades médicas. Estilo de vida saludable, que incluya actividad física regular (al menos cinco días a la semana) y dieta variada rica en fruta, verdura y pescados, pobre en carnes rojas y sin bolleria industrial ni alimentos precocinados. Y para mi lo más importante: educar a los niños para una vida saludable. La edad idónea es entre los 7 y los 14 años (antes no lo entienden y después no nos hacen caso). Enseñar con el ejemplo es la forma más eficaz de enseñar. Dejar como herencia salud es mejor que dejar dinero.
 

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