El Concello se abre ahora a desbloquear el Consorcio Casco Vello

El funcionamiento del Consorcio Casco Vello (CCVV) está bloqueado en parte en los dos últimos años por el veto de los representantes municipales a los presupuestos (aunque la Xunta tiene el 90% del CCVV, las decisiones se toman por unanimidad) y a otros acuerdos, aunque ayer, primera reunión presencial del consejo de administración y comité ejecutivo del organismo en el Edificio Redeiras, se atisbó un posible cambio.

Eso se puede desprender de un audio remitido por la concejala de Urbanismo, María José Caride, donde asegura la voluntad de colaboración del gobierno local “para hacer posible el acuerdo del alcalde y la delegada de la Xunta y presidenta del CCVV, Ana Ortiz, para desbloquear las decisiones por unanimidad”. En la búsqueda de desbloqueo del CCVV, destacó Caride que se adoptó la posibilidad de celebrar reuniones previas para tratar el presupuesto y que para 2024 se ha tomado la decisión de una duplicidad del presupuesto material de inversión de 1,2 millones a 2,5 millones “con impulso decidido a proyectos para 2024 y poder comprar propiedades en el Casco Vello para su regeneración, es buena noticia que se dio ayer”. No obstante, aseguró la concejala que siguen sin acceso a un informe sobre la idoneidad de la instalación de una sucursal del CGAC (el centro de arte contemporáneo de Santiago) en O Berbés. “No sabemos la propuesta por la Xunta, si el espacio reúne las condiciones necesarias”, indicó. La idea de la Consellería de Cultura era utilizar un edificio en ruinas del Berbés para el CGAC, pero el asunto está bloqueado.

Edificio de Rúa Real

Por su parte, Ana Ortiz anunció la entrega de cuatro nuevas viviendas de promoción autonómica a otras tantas familias que resultaron adjudicatarias tras finalizar las obras de rehabilitación del edificio situado en el número 13 de la calle Real. Así, avanzó que ya están cerrados los contratos con los adjudicatarios de las viviendas de la promoción de Real 13 que permitió recuperar uno de los mayores edificios construidos en el barrio histórico vigués. El inmueble, levantado sobre un solar de 116 metros cuadrados, cuenta con una frente de fachada hacia la calle de 10,24 metros. Fue adquirido por el CCVV en diciembre de 2019 y su reforma supuso una inversión de 605.150,50 euros.

La delegada destacó que el proyecto de rehabilitación, que incluye además la creación de un local comercial en la planta baja, fue elaborado por Rodríguez y Rivoira Arquitectos y recoge como uno de sus elementos distintivos la conservación en la fachada de piedra de las grandes ventanas que caracterizan al edificio. Se trata de una de las principales rehabilitaciones en la zona baja del Casco Vello realizada en los últimos años, con una situación excelente al estar muy próxima a puntos de interés como la plaza del Berbés, la Concatedral, A Laxe o la plaza de la Constitución. Cada una de las nuevas residencias tiene una superficie aproximada de 63 metros cuadrados y cuenta con un dormitorio, un baño, comedor-cocina y zona de servicios. En la misma calle se sitúa también la sede de los Registros Mercantiles de Vigo, construidos sobre una serie de edificios adquiridos en su momento por el organismo público. El edificio tuvo que ser vaciamiento debido al mal estado de conservación de esta centenaria construcción.