La asociación de padres y madres de este centro escolar, que cuenta con 140 alumnos, reclaman una solución urgente. "Nos parece indignante que con esta ola de frío los niños estén desde las siete y media de la mañana, en la que comienza el aula matinal, entre los 2 y los 4 grados de temperatura", señalan las familias.
A eso se une la necesidad de ventilar el aula por el protocolo covid y el hecho de que el centro está situado cerca de un río. "Nuestras hijas e hijos no pueden ni escribir, tiritan de frío, salen del colegio con dolor de barriga, de espalda, destemplados, con las manos y pies congelados", describen unos padres indignados por esta situación. Reclaman al Concello que se arregle cuanto antes la caldera. Además, aprovechan para recordar que el centro está sin conserje y que faltan enchufes y wifi en la segunda planta.
