Pese a que desde un primer momento se barajó la posibilidad de que los menores hubiesen estado presentes en el momento del ataque que acabó con la vida de Beatriz, presuntamente a manos de su expareja, del atestado de la Guardia Civil se desprenden unas declaraciones cruciales. Durante el turno de interrogatorios realizado a familiares cercanos, el abuelo paterno declaró que los propios menores, en concreto el mayor de ellos, le habían dicho que “papá mató a mamá”. Ante las dificultades de tomar testmionio a los pequeños, estas palabras delatarían al autor de los hechos. Fueron varios miembros de la familia quienes fueron conocedores de ello después de que Ángel Rodríguez hubiese dejado a sus hijos, tras, presuntamente, haber cometido el crimen y antes de partir hacia la ciudad ourensana, donde se entregó en la comisaría de la Policía Nacional a las 9 de la mañana de este lunes. Nada más entrar en las dependencias entregó las llaves de su coche en la garita de vigilancia, se sentó en el suelo, se descalzó y entró en estado catatónico hasta hoy.
Una vez rematadas las pruebas forenses, el juzgado procedió a autorizar el traslado del cuerpo de Beatriz al tanatorio del Miñor en donde permaneció en la sala cuatro desde el pasado martes hasta las 16 horas de ayer miércoles. Un cuarto de hora después, se celebró el funeral en la iglesia de Santa María en Santa Liberata al que acudió una gran multitud de personas para darle el último adiós y mostrar su solidaridad con la familia. Posteriormente se dio paso al sepelio que tuvo lugar en el Cementerio Municipal de Baiona. El crimen de esta vecina de Percebelleira es el primero de violencia de género este año en Galicia y el octavo en España.
El presunto asesino acababa de perder la patria potestad
La pareja mantenía desde hace tiempo un conflicto por la custodia de los niños que se resolvió hace tres meses después de que un Juzgado de Familia de Madrid emitiese una sentencia a favor de la madre. No solo se la otorgó sino que además le retiró la patria potestad de los niños al presunto asesino. Hasta este momento tenía impuestas medidas relacionadas con el régimen de visitas al uso, pero a partir de ese momento quedó restringida cualquier decisión que pudiese tomar y que afectase a aspectos sanitarios o educacionales. De este modo, un cambio de colegio, de médico o autorizaciones para recibir cualquier tipo de tratamiento a los menores pasó a ser decisión única y exclusiva de Beatriz. Este podría haber sido uno de los desencadenantes que llevase a su expareja a acabar con su vida.
Más de 200 personas contra la violencia machista en Vigo
Más de 200 se echaron a la calle en Vigo para manifestarse en contra del crimen machista que acabó con la vida de la vecina de Baiona, Beatríz Lijó. Durante la concentracióndelante del Museo Marco se leyó un manifiesto para pedir medidas de detección y prevención frente a la violencia de género, mientras se lanzó un mensaje de poyo a los familiares de la víctima. El acto celebrado dentro de la “Marcha Mundial das Mulleres” y que logró involucrar a 33 localidades de Galicia, finalizó con la consigna “queremonos libres y queremenos vivas”. A él acudieron miembros de la corporación municipal y diputados del Parlamento gallego.