Mortandad en Playa América: aparecen miles de navajas y cangrejos muertos en Nigrán

Las navajas y los cangrejos muertos en Playa América. // J.V. Landín
photo_camera Las navajas y los cangrejos muertos en Playa América. // J.V. Landín

Restos de cientos de cangrejos y de navajas aparecieron sobre las playas de Nigrán con posible relación con problemas en el río Muiños y el aumento del aporte de agua dulce

Cientos de cangrejos aparecieron este jueves muertos en Playa América, así como navajas y otros mariscos. Todo ello, apenas una semana después de que se produjera un vertido que tiñó de azul el río Muíños, al parecer procedente de una empresa emplazada en el polígono Porto do Molle, si bien Seprona, que investigó lo ocurrido, no facilitó datos concretos sobre el origen.

 

Este jueves, mariscadores de Nigrán lamentaron lo ocurrido y vincularon un hecho con otro, aunque apuntaron otras circunstancias a mayores que habrían provocado la llegada a la orilla de los restos de moluscos y pequeños crustáceos. 

 

Entre otras posibles causas que estarían detrás de este fenómeno destaca sobre todo el aporte de agua dulce que provoca la muerte del marisco, un fenómeno bien conocido y que ha sido letal en el fondo de la Ría, con una alta mortandad de ostra cultivada. El caudal de los acuíferos se incrementó durante el otoño y también en diciembre y los primeros días de enero y su llegada al mar provoca un desalinización que afecta a la fauna que cría en esas zonas.

Además, habría una tercera razón, no excluyente con las anteriores, que sería el mal funcionamiento de la depuradora, que ha provocado graves problemas en el pasado y que afecta al fondo marino, donde se crían navajas y otros moluscos.

 

En varias ocasiones las playas principales de Nigrán se vieron obligadas a cerrar parcialmente por los vertidos desde el río, lo que también ha imposibilitado mantener la bandera azul, a las que el Concello ha terminado renunciando pese a su importancia turística. Hace dos años, el Concello de Nigrán contrató una empresa por algo más de 100.000 euros para tratar de reducir los vertidos de pluviales a los colectores de residuales que corren paralelos al río.

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