La Universidad de Vigo recupera al investigador Luis Liz Marzán, que está en la élite científica mundial en el diseño de biomateriales, como catedrático a tiempo parcial y con un laboratorio propio en el Centro de Investigaciones Biomédicas (Cinbio) del campus.
Liz Marzán trabajó en la UVigo durante 17 años (de 1995 a 2012) hasta que fue fichado como director científico del Centro de Investigación en Biomateriales BiomaGUNE del País Vasco. En enero de este año cedió el relevo en la dirección de este centro en el que sigue trabajando como investigador y esta circunstancia le permite su regreso parcial a la UVigo.
El rector vigués, Manuel Reigosa, expresó la satisfacción de la comunidad universitaria por su regreso, que supuso preparar instalaciones y equipamientos adecuados a su nivel científico. Reigosa agradeció el apoyo de la Xunta de Galicia para crear las condiciones necesarias, que suponen la apertura de un nuevo laboratorio en el Cinbio, prevista para finales de este verano, y la compra de equipos de microscopía electrónica porque “los que tiene la Universidad fueron muy potentes en su momento, pero ahora se han quedado un poco obsoletos”, así como aparatos de espectroscopia específicos para su línea de investigación. Liz Marzán recibió ofertas de otras instituciones pero eligió Vigo entre otras cosas al garantizarse que dispondrá de los medios necesarios. Su incorporación será efectiva la próxima semana y en breve abrirá un proceso para reclutar personal en formación para el nuevo laboratorio.
Reigosa recordó que en la UVigo “la investigación es una prioridad y goza de buena salud” y que en los dos últimos años a pesar de la pandemia se marcaron cifras récord de publicaciones en revistas de máximo nivel, un logro que atribuye a “un cuadro de investigadores muy potente y comprometido”, y al hecho de que la Universidad se articule en centros, institutos y agrupaciones “lo que permite que los resultados sean cada vez mejores”. También puso en valor la estrategia de captación de “científicos de altísimo nivel para que nos puedan llevar a un nivel superior”.
El catedrático tiene previsto además dar clase, especialmente en el máster pero también aspira a colaborar en el grado, algo que no es nuevo para él porque en los últimos años ya dio algunas conferencias en asignaturas de la UVigo. Para Reigosa, esto puede suponer un atractivo para los estudiantes que elijan la UVigo.
“Crearé un grupo y buscaré nuevos materiales para la biomedicina”
Luis Liz anuncia que reforzará la colaboración que nunca dejó de tener con algunos investigadores de la UVigo, pero también tiene previsto reforzar una línea de investigación que tiene activa en este momento. El apoyo de la Xunta de Galicia le permitirá crear un pequeño grupo de investigación y a partir de ahí hará lo posible para conseguir financiación competitiva que permita reforzar el nuevo laboratorio. Explicó que en los últimos 4 o 5 años le viene interesando el diseño de materiales imitando a la naturaleza (biomiméticos) y en concreto en el campo de los nanomateriales los desarrollos recientes relacionados con los materiales quirales (que no tienen simetría de reflexión). Explica que en moléculas es algo que se conoce desde hace bastante tiempo, pero en materiales inorgánicos es bastante novedoso. Hay ejemplos en la naturaleza y se trata de saber cómo afecta esta situación a sus propiedades. A partir de ahí se podrían diseñar materiales que tengan propiedades interesantes en biomedicina y en otros campos.
El investigador agradeció el interés del equipo rectoral, que intentó su regreso en los últimos cuatro años, así como el respaldo de la Xunta. Destacó la buena acogida que tuvo en el Cinbio, donde considera que se pueden dar colaboraciones adicionales, y en su departamento. Preguntado por su trayectoria en el BiomaGUNE, apuntó que le permitió tener una visión muy amplia de cómo se pueden combinar temas de investigación para acabar formando un proyecto coherente y se mostró orgullos de haber reforzado la colaboración interna. Esta situación les permitió lograr la acreditación como unidad de excelencia María de Maeztu, algo que también aspira a conseguir el rector para centros de investigación de la UVigo que tienen el sello de Galicia.
Preguntado por su investigación sobre el cáncer, dijo que “hay avances destacados pero no puedo comentarlos porque aún no los hemos publicado”. Señaló que avanzaron en el diseño de modelos celulares tridimensionales con sensores integrados. El objetivo es hacer un barrrido de marcadores para hacer una clasificación de pacientes y dar un paso más en la medicina personalizada.
