Las mariscadoras de Arcade se encuentran en “una situación límite”, tal y como explicó su portavoz, Rita Míguez. Las trabajadoras del mar se reunieron ayer, a las 10:00 horas, frente las puertas de la Cofradía de Pescadores Virgen del Carmen para plantar cara a sus “prácticas abusivas e injustificadas” y a unas “cuotas desproporcionadas.”
“Hace poco tuvimos una reunión con la Cofradía donde nos dijeron que quieren implantar una cuota de 650 euros, cuando el año pasado pagamos 50 euros anuales. Pasamos de 50 euros anuales a pagar 55 cada mes”, narró Míguez.
“Nos imponen una cuota de socios que es inasequible y que es la misma que tienen los que marisquean a flote y trabajan 20 días al mes. Nosotras podemos trabajar cuando las mareas tienen unas determinadas características. Por ejemplo, el mes que viene que tenemos cuatro días de trabajo en total. Estamos de acuerdo en colaborar con los gastos de la Cofradía, pero tiene que ser algo proporcional”, comentó una de sus compañeras, Mónica Sanmartín.
Otro de los puntos de esta concentración fue la puesta en marcha del barco que las mariscadoras emplean para acceder a los viveros y bancos de marisco. “Ahora nos extorsionan con que no se usa el barco. El barco, que se logró con una subvención pública para el traslado de las mariscadoras, lo tenemos sin arreglar, cuando ese arreglo ya está pagado por nosotras. Si no nos dejan el barco para limpiar, regenerar y trabajar no podemos ayudar a la Cofradía”, señaló la portavoz de las trabajadoras.
Esta situación se suma a un paro de trabajo desde el mes de octubre y una última campaña con una mortandad del 100%, lo que empuja al límite a las mariscadoras que se incorporan al trabajo el 8 de abril. A pesar de que este medio contactó con la Cofradía, esta no dio ninguna declaración sobre esta situación.
