Carmen Lobato y su lucha por la vivienda social en Redondela

Carmen Lobato es una vecina de Redondela que tiene un objetivo muy claro: conseguir que se planifique y ejecute un proyecto de viviendas sociales con posibilidad de compra en Redondela. Para conseguir esto, Carmen se coloca religiosamente de lunes a viernes, desde el uno de septiembre, desde las 9:00 a las 13:30 horas en los soportales del Concello, donde apela a los viandantes de la villa para que firmen la la iniciativa por la que lucha.

“Yo fui una mujer que se fue a la calle en el año 2004 con mis hijos gracias a una orden de desahucio. Gracias a eso creo que tengo como un trauma que me llevaré a la tumba”, relata con pesar Lobato. Esa experiencia, sumada a la realidad actual de los alquileres en Redondela, fue lo que motivó a Carmen a intentar reunir más de 4.000 firmas para conseguir llevar ante la Xunta la propuesta para la realización de un proyecto que busca la planificación y ejecución de viviendas sociales, con posibilidad de compra para los inquilinos, dentro del municipio. “Con alquileres de los 700 euros para arriba es imposible encontrar una casa”, recalca Lobato.

A pesar de la situación, Carmen afirma que entiende que “cada uno pueda hacer lo que quiera con su vivienda” pero no ve “empatía por la gente que ha pagado un alquiler durante años y es expulsada de su hogar de un día para otro”.

“Los políticos son los que tienen que meter mano a esta situación porque, con estos precios y precariedad laboral están incentivando a que la gente tire las puertas de las casas desocupadas y entren a vivir ahí. No les queda más opción”, afirma Carmen aunque recalca que no está a favor de la okupación ilegal, ya que “como se estipula en el artículo 47 de la Constitución, todos tenemos derecho a una vivienda digna”.

Aun con todo en contra, Carmen reniega a pedir ayuda a la corporación local. “Solo fui para tramitar los permisos, pero no quiero saber nada de ningún grupo político”, destaca la mujer que subraya la importancia de las firmas porque su abuela le enseñó que “una manifestación con gente no tiene el efecto del papel”.

Ahora, con 2.000 firmas de vecinos y peregrinos que acuden desde Extremadura, País Vasco e incluso del extranjero, Carmen ve el final de su lucha por la igualdad social un poco más cerca. “Una vez consiga las firmas no pienso parar hasta llegar a las últimas consecuencias. Las viviendas con el alquiler turístico están consiguiendo echar a la gente de Redondela fuera del pueblo y eso no se puede permitir”, sentencia Lobato.