El balance de víctimas a causa de la ofensiva militar lanzada por el Ejército de Israel contra la Franja de Gaza ha aumentado a más de 18.400 muertos y 50.000 heridos, según indicaron ayer las autoridades del enclave, controladas por el grupo islamista. El portavoz del Ministerio de Sanidad gazatí, Ashraf al Qidra, especificó que en estos dos meses de guerra se habían confirmado 18.412 fallecidos y 50.100 heridos, si bien se teme que la cifra sea mucho más alta debido a que hay miles de personas desaparecidas entre los escombros de los edificios bombardeados por Israel. Esto supone una media de casi 300 muertos diarios.
Al Qidra reiteró las acusaciones contra las tropas de Israel por un asalto contra el Hospital Kamel Aduan (norte) y detalló que los militares “pidieron a la administración del hospital que diera un arma al hombre encargado de seguridad para justificar su asalto terrorista”. “Tenemos que esto sea usado para inventar nuevas mentiras contra el hospital y su personal para repetir el escenario del Hospital Al Shifa”, alertó.
Crímenes en los hospitales
En este sentido, recalcó que “las fuerzas israelíes forzaron, bajo amenazas, al personal médico, los heridos y los enfermos para que se reunieran en el patio del hospital” y manifestó que el centro médico está “sin agua, comida y electricidad”. “Los crímenes israelíes contra los hospitales en el norte de la Franja de Gaza buscan poner fin a la presencia de centros sanitarios para forzar a los residentes a desplazarse”, argmentó.
“La situación sanitaria en los hospitales en el sur de Gaza es más que catastrófica, ya que carecen del nivel mínimo de servicios para atender a los heridos”, especificó Al Qidra, quien hizo hincapié en que “los equipos médicos no pueden atender al gran número de heridos que llegan a los hospitales en el sur”. “Pedimos a las instituciones internacionales que ayuden con medicinas, bienes, combustible y equipos especializados”.
El portavoz del Ministerio de Sanidad de Gaza añade como problema añadido la propagación de epidemias, enfermedades infecciosas, la desnutrición y la falta de agua potable e higiene. “Los equipos sanitarios han detectado 326.000 casos de enfermedades infecciosas llegados a centros de salud desde los refugios, si bien es probable que la cifra sea mucho más alta”, dijo, antes de pedir a las instituciones internacionales que encuentren “mecanismos efectivos” para poder dar ayuda a las personas en los refugios y mejorar las condiciones en los mismos. Además, reiteró que el Ejército de Israel está usando la ayuda sanitaria como “un arma para matar a heridos y enfermos”.
