Un voraz incendio calcina en el Xurés más de 200 hectáreas

El fuego que devora el Xurés ourensano tras entrar por Portugal continuaba todavía fuera de control, aunque cercano a su estabilización, tras arrasar más de 200 hectáreas (el equivalente a 200 campos de fútbol) en la parroquia de Venceáns (Entrimo), convirtiéndose así en el incendio de mayor superficie vivido en la provincia de Ourense durante 2024. La columna de fuego entraba desde Portugal el pasado miércoles, donde ya se calcinaron a su paso más de 1.000 hectáreas, y afecta al parque de Baixa Limia-Serra do Xurés espoleado por las fuertes rachas de viento, que abrieron el frente y están dificultando las tareas de extinción a los 28 agentes forestales, 52 brigadas, 21 motobombas, cuatro palas, 11 aviones y 10 helicópteros, entre ellos, la BRIF de Laza, a quienes se les han asignado combatir en el flanco izquierdo del fuego.

Las tareas de extinción se encuentran también pendientes del tiempo. Con una previsión de lluvias al 55% que mantiene Meteogalicia, aguardaban que las precipitaciones ayudasen a reducir el tamaño de los focos.La última notificación de la Consellería de Medio Rural en la joranda de ayer indicaba que “evoluciona favorablemente cara a súa estabilización”, lo que permitiría establecer un perímetro en torno al cual no se siga extendiendo la superficie quemada.

Los vecinos hablan

La llegada de las llamas pillaba por sorpresa a unos establecimientos hosteleros que comenzaban a preparar la temporada baja, pasadas las fechas con mayor número de visitas. Tania Vidal, que regenta el Mesón Beny, relataba que “está por el monte alto, y por ahora parece controlado. Esperamos lluvia esta noche, así que pinta mejor que ayer. Había miedo por el viento”. Vidal también relataba que “ayer (por el miércoles) por la tarde había una luz dorada muy rara, por el viento con el humo que cubría el sol”, y deseaba “que no llegue al bosque, si es estepa no daña, pero con la reserva y paraíso que tenemos es una lástima. Aquí por desgracia es frecuente. Cuando fue en el 2017 se quemaron muchas hectáreas, ahí hubo un incendio importante”.

Otra de sus compañeras aportaba que “septiembre siempre es un mes bajo para el turismo. La temporada alta es del 25 de julio al 17 de agosto y,a día de hoy, somos los del pueblo de siempre y turismo no hay. Es una zona de emigrantes, ahora mismo hay turismo en la zona de A Peneda, que es la semana fuerte”.

El despliegue de efectivos ha provocado estos días la paradoja de que sean las brigadas los nuevos clientes. Es el caso de Rufina Alonso, responsable del Hotel Barcelona, relataba que “chamáronnos ás 20,00 horas para unha reserva a unha brigada, estábamos volvendo de estar pechados e deberon amañar doutra forma. Demos tamén cama a portugueses e xente que volve e ou non ten casa ou non a ten en condicións para estar alí”. Para Alonso, el incendio “afecta máis á natureza que ao turismo. Outros anos foi unha desgracia”.