masacre terrorista en barcelona

La célula de Ripoll, una "manada de lobos" que actuó a la desesperada

Los expertos destacan la figura del "reclutador" en su radicalización

nnn Los terroristas de Cataluña eran, más que una célula organizada, una manada de lobos solitarios unidos por un líder, y España debe prepararse para esta modalidad terrorista, según expertos en lucha antiyihadista, que coinciden en que en nuestro país no hay guetos que sirvan de caldo de cultivo.
En Cataluña pretendían un gran golpe cuando su centro de operaciones en Alcanar (Tarragona) saltó por los aires y eso les llevó a improvisar otros ataques. A muchos ciudadanos les ha sorprendido que llevasen meses radicalizados y preparando atentados, sin que nadie les detectase, pero a los expertos no les extraña tanto, porque son conscientes de su evolución: el ISIS o Dáesh hace ahora propaganda en internet y redes sociales para captar a jóvenes de apariencia "normal", como los de Ripoll (Girona).
Así lo relatan,  incidiendo en que ahora España ha sufrido el golpe de un tipo de terrorismo como el que llevan meses padeciendo otras ciudades europeas, sin que eso signifique que haya más terroristas entre nosotros o más peligrosos.
El grupo que tenía su base de Alcanar se ha mostrado "nada profesionalizado", actuando "a la desesperada y prácticamente abocado al suicidio", según el coronel experto en yihadismo Pedro Baños.
El perfil es similar al de otros que han actuado en Europa, sobre todo a los que en junio mataron a ocho personas en Londres: jóvenes de segunda generación de marroquíes afincados en España que son vulnerables psicológicamente, en ocasiones porque "no se sienten ni de allí ni de aquí", dice Baños.

corriente salafista
El experto añade que en Cataluña "ha entrado con mucha fuerza" la corriente del islam denominada salafista en una modalidad excluyente que anima "a estar al margen de la sociedad", propiciando "un proceso de radicalización en la línea de lo que se está consolidando en países como Francia y Bélgica".
El investigador de la George Washington University y experto del Observatorio Internacional de Estudios Sobre Terrorismo de Covite, Javier Lesaca, tiene claro que los yihadistas que han golpeado España son "una manada de lobos" como las que ya han actuado en otras capitales europeas. Sostiene que en noviembre de 2016 el ISIS o Estado Islámico "empezó una estrategia de comunicación para tener lobos solitarios en redes sociales, con manuales y vídeos en los que ya no se pide que viajen a Siria a formarse sino que ataquen en sus lugares "sin necesidad de una estructura profesional detrás".
"A España le pasa lo mismo que al resto de la Unión Europea, porque el mensaje es global,  y "vamos a tener que aprender a convivir con esto, con las manadas de lobos solitarios y a asumir que no podemos vigilarlo todo", asegura el autor del libro "Armas de seducción masiva".
El politólogo Álvaro Herrero de Bethencourt, investigador del mismo Observatorio, recordó que la mayoría de estos terroristas estaban integrados en Ripoll, pero "se puede pasar de ser solo simpatizante a ser activista y cometer atentados" en poco tiempo si se recibe el mensaje adecuado en un momento de "debilidad".

labor de adoctrinamiento
Para el profesor de Ciencias Políticas en la Universidad Pablo de Olavide (Sevilla) Manuel Torres destaca al reclutador, "que moviliza a esta juventud hacia un propósito concreto", pero apunta que es extraña la figura del imán de Ripoll, Abdelbaki Es Satty, sobre todo "por la capacidad que tuvo para movilizar a un grupo tan extenso". 
"Asombra que estos doce individuos se organizaran para atentar y nadie se diera cuenta. Es un fallo en términos de prevención", asegura el codirector del Instituto de Estudios sobre Conflictos y Acción Humanitaria, Jesús Núñez, que cree que las redes sociales han facilitado el adoctrinamiento de estos jóvenes pero "es necesario el cara a cara para que el individuo se radicalice".n

Te puede interesar