Vigo crece en empresas, empleo, exportaciones y venta de vivienda
La economía viguesa mejora en todos sus indicadores aunque enfría su crecimiento de cara a la recta final del año
La economía viguesa enfila la recta final del año en buena posición, con los principales indicadores creciendo. Es el caso del empleo, las exportaciones, la creación de empresas o la venta de viviendas y de coches. Todos en positivo en el acumulado del ejercicio, si bien algunos muestran signos de agotamiento y debilidad o crecen por debajo de la media gallega.
Exportaciones de récord. Vigo ocupa los primeros puestos en España gracias al impulso de la automoción y la industria en general, fundamentalmente. Las ventas al exterior de la provincia de Pontevedra -el núcleo duro es Vigo- aumentaron casi un 4% en el primer semestre hasta 7.900 millones de euros de valor de las mercancías movidas, un récord histórico. Registra el mayor superávit comercial (diferencia entre exportaciones e importaciones) de todo el país y se sitúa como la cuarta provincia más exportadora, solo superada por Barcelona, Madrid y Valencia. En este caso, el crecimiento es ligeramente superior al de Galicia (de un 3,5%).
El dinamismo empresarial vigués es el más relevante de la comunidad gallega. Cerca de 600 nuevas sociedades mercantiles se crearon en los ocho primeros meses del año en la comarca de Vigo; es decir, una de cada cuatro compañías constituidas en Galicia. La creación de empresas avanza a un ritmo de un 4% con respecto a 2023 en Vigo, pero lo hace por debajo de la media gallega, que crece el doble.
El mercado laboral arroja luces y sombras. Son buenos los datos de afiliados a la Seguridad Social. Hay 10.600 ocupados más en Vigo que hace un año, teniendo en cuenta la última Encuesta de Población Activa (EPA) correspondiente al segundo trimestre con la industria encabezando la creación de empleo, seguida de la construcción y el sector servicios. En cuanto al desempleo, la tasa de paro es la mayor en la comunidad, un 12%, junto con Ferrol. El número de parados registrados se sitúa por debajo de las 16.000 personas, el mejor dato de, al menos, la última década.
La compraventa de vivienda (nueva y usada) también sigue la tendencia alcista con un incremento de un 10,4% y 3.300 operaciones en el primer semestre en el conjunto de la provincia, donde Vigo tiene el mayor peso. La venta de inmuebles en Galicia creció menos, un 8%.
La venta de coches, otro buen termómetro de la economía, deja un alza de un 8,8%, por debajo de la media gallega que fue de un 10%. Preocupante es el retroceso de las matriculaciones de vehículos diésel, que acumulan un descenso de un 25%, y de los electrificados, que pierden cuota de mercado.
Stellantis al ralentí y etapa de bonanza para los astilleros
La automoción viguesa vive una etapa compleja, marcada por la competencia asiática, la amenaza ‘low cost’ y la incertidumbre por el coche eléctrico. El ejemplo más claro lo vemos en la factoría de Stellantis, que acaba de recortar la producción en uno de sus turnos y afronta un periodo de transición que durará varios años hasta que empiece a fabricar un nuevo vehículo, todavía pendiente de que el grupo se lo asigne, así como la plataforma eléctrica que tampoco está adjudicada de manera oficial. En la industria auxiliar hay preocupación, tal y como manifestó el clúster Ceaga en varias ocasiones, con respecto a las decisiones del fabricante para el reparto de componentes, que está beneficiando en muchos casos a otros países del entorno, como los países del norte de África.
El naval, por su parte, está viviendo una etapa de bonanza con construcciones de buques. Solo Armón, que es el astillero privado líder en España, tiene 13 barcos en cartera y genera más de 600 empleos con la industria auxiliar.
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