Stellantis Vigo aguarda la visita inminente del CEO del grupo automovilístico, Carlos Tavares. Está prevista para el lunes y se espera que sea de carácter privado, según pudo saber este diario, si bien tiene una especial trascendencia debido al importante momento que vive la factoría de Balaídos. Ésta está pendiente de la adjudicación de proyectos industriales -una plataforma para fabricar coches eléctricos- y una inversión de unos 600 millones que asegurarían trabajo para la próxima década. También a la espera de que el Gobierno inicie el proceso para la llegada de la alta tensión a Balaídos.
La agenda de Tavares no ha trascendido, ni se espera. Sí fue pública la visita que realizó hace unos meses a la factoría del grupo en Mangualde (Portugal), donde fue recibido por el gobierno luso y anunció la asignación de vehículos. También hizo pública la producción de coches eléctricos en la fábrica italiana de Cassino así como inversiones en Turquía, Marruecos y Argelia, arropadas por sus respectivos gobiernos.
Con España no hay la misma fluidez. Tavares se mostró en diversas ocasiones muy crítico con la falta de apoyo por parte del Ejecutivo central que tiene en sus manos la ayuda económica que hará a la factoría a través del Perte del vehículo eléctrico y conectado. Stellantis Vigo aspira a conseguir fondos europeos con el proyecto que presentó, una plataforma industrial para electrificar el centro y que el grupo le asigne nuevos modelos. Esto con respecto al Ministerio de Industria, que espera fallar la última resolución del Perte este mes. El otro ministerio del que depende el futuro de la factoría es el de Transición Ecológica, que asegura tener muy avanzada la subestación eléctrica para la alta tensión del polígono.
Donde está más despejado el camino es en el ámbito laboral con la reciente firma del convenio colectivo de la fábrica viguesa, que garantiza paz social hasta 2027.
Por otra parte, el ministro de Industria, Jordi Hereu, trasladó ayer a la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac) la voluntad del Gobierno de lanzar la tercera convocatoria del Perte VEC durante el primer trimestre de 2024 para seguir atrayendo proyectos de producción de baterías y de cadena del vehículo eléctrico.
