Un play-off por el título que no se juega al mejor de una serie de partidos impar -a tres, cinco o siete-. Una eliminatoria con ida y vuelta en la que el resultado acumulado de ambos encuentros no tiene importancia. Ni una cosa ni la otra. A medio camino entre estos dos sistemas de competición se va a jugar este año la post-temporada de la División de Honor, en la que la lucha por ganar la Liga va a resultar, como mínimo, diferente a cualquier fórmula empleada en el deporte. Sin importar la diferencia de goles, en caso de que cada contendiente sume una victoria, se celebrará una prórroga en el choque de vuelta. Dicho de otro modo, si un equipo gana el duelo de ida de 10 y pierde de uno en el de vuelta, tendrá que disputar un tiempo extra para desempatar ese supuesto empate.
Así traslució esta semana en unas declaraciones de Imanol Álvarez, entrenador de Bera Bera, en el medio especializado ‘Deporte 100x100’. El formato se aprobó en la asamblea de la Federación Española celebrada en agosto. Entonces se destacó que la reducción a dos partidos en lugar de tres respondía a una cuestión de falta de fechas derivada de los compromisos internacionales de la selección. Sin embargo, esta particularidad de la resolución ha pasado desapercibido para la práctica totalidad de los clubes de la Liga. También para Guardés y Porriño, que reconocen haberse enterado recientemente.
Como parece lógico, ambas entidades coinciden en que este detalle no es el de mayor justicia competitiva. No obstante, las dos lo asumen con cierta resignación y prefieren tirar de practicidad y prepararse para ello. Hasta el punto de que, por ejemplo, el equipo louriñés ya entrena situaciones de prórroga en algunas sesiones.
El caso es que la liga regular se ve devaluada ya de por sí con la post-temporada, con equipos que seleccionan más los esfuerzos sabedores de que no les cambia demasiado un puesto arriba o abajo de cara al play-off. Pero este aspecto en particular puede descafeinar el nivel dentro de la propia eliminatoria por el título. Y es que el conjunto que gane en la ida sabe que tiene asegurada la prórroga en la vuelta, por lo que puede guardar jugadoras clave en caso de verse bastante por detrás y afrontar el tiempo extra con mayor frescura. Derivadas de este novedoso plan competitivo.
