El Conservas Orbe Rubensa Porriño sumó ayer una nueva victoria en Navarra ante el Beti-Onak (18-21) tras una segunda parte seria de las pupilas de Isma Martínez, que aumentaron una marcha para abrir una pequeña brecha en el marcador que sería insalvable para las locales. Ambos con los mimos puntos en la clasificación, las porriñesas recuperaron alguna de sus jugadoras lesionadas y buscaba dos puntos importantes tras no dar la talla la jornada pasada ante el Elche.
En menos de un minuto, el conjunto navarro anotó sus dos primeros tantos ante el Porriño. Las jugadoras de Isma no había entrado concentradas y el rival impuso su propio ritmo sin dejar margen. Tras unos flojos cinco minutos, el ataque visitante comenzó a carburar. Pasados los diez primeros, el conjunto dirigido por Isma Martínez había dado la vuelta al marcador (3-5). Malena Valles aumentaría la renta a tres goles desde la línea de siete metros. El Replasa Beti-Onak propuso una defensa 5:1, que impedía el juego con comodidad de las primeras líneas porriñesas. Ante ello, el juego con el pivote se transformó en esencial para el movimiento de balón y en la creación de espacios.
La segunda parte también empezó de una forma complicada para el Conservas Orbe Rubensa de cara a portería, pero Maider Barros volvería a ponerse la mochila de goleadora para no irse del partido. Valeska Lovera, desde los siete metros, volvería a poner dos tantos por encima al equipo local. Tras una pequeña reacción visitante, en los últimos 15 minutos el juego de ambos equipos se volvió espeso y los errores se hicieron presentes. Ahí aprovechó el Porriño para asestar un golpe, a la postre mortal, con un parcial de 0-3 definitivo y ascender a los puestos altos de la tabla. El próximo encuentro de las porriñesas será como local ante el La Calzada Gijón.
