El Porriño se acerca al pase tras ganar en Turquía

El Conservas Orbe Zendal Porriñotiene casi hecho su pase a la siguiente ronda de la Copa Europea tras ganar ayer el partido de ida ante el Bursa en Turquía por ocho goles de renta. Pero más allá del marcador, lo que resulta diferenciador fue la contundente sensación de superioridad del bloque porriñés ante un rival otomano con menos recursos. Esa mayor capacidad provoca que los peros de una eliminatoria con los dos duelos fuera de casa y en poco más de 24 horas, después de un largo viaje y de tener la mitad de descanso que el rival desde el último partido, parezcan solventables. Aunque este domingo (16:00) habrá que certificar el pase a dieciseisavos en el mismo escenario -un Ücevler Sports Facility que ayer congregó a unos 200 aficionados animosos pero no determinantes por la presión al dúo arbitral- defendiendo la ventaja lograda ayer. Que fue de 8 tantos pero que perfectamente pudo ser de más.

Ha conseguido este Porriño una competitividad de serie. Siempre está, aunque no siempre con acierto. Y sabían las jugadoras de Isma Martínez que debían demostrar su concentración desde el arranque. Un 4-1 de partida -las porriñesas ejercían ayer de locales-, forzando un tiempo muerto del técnico otomano, Mehmet Isik, antes de los cinco minutos, era un gran presagio. Pero la portería empezó a marcar diferencias, con intervenciones de la local Sevilay Imamoglu y menos acierto de Fátima Ayelen Rosalez. Y comenzaron a aparecer las referentes en ataque del bloque turco: Emine Goldemir, Eda Cetin y Ceren Demircelen. La primera se apagó rápido pero las otras dos acabaron el duelo con nueve tantos cada una; es decir, 18 de los 26 goles. Una señal para hoy.

La cuestión es que el Bursa pasó del 4-1 a un peligroso 6-8. Isma Martínez tuvo que parar el partido justo antes del minuto 13 para recordar lo obvio: competitividad y paciencia. A la espera de que los porcentajes en portería, que tanto dependen del rendimiento defensivo, se igualasen. Al descanso, el Bursa disfrutaba de un 31% (7 paradas) frente a un escaso 17% porriñés (3 paradas) después de que Ana Belén Palomino saliese a la pista ya en la recta final de la primera parte. El Porriño frenó el intento de escapada local y un último arreón le permitió pasar del 13-14 al 17-15 del descanso. El mayor número de recursos del bloque louriñés se traducía al marcador. Además, la primera media hora se cerró sin exclusiones porriñesas y con dos ya para la local Betul Yilmaz.

Tocaba refrendar el camino andado en el arranque de la segunda parte. De nuevo, la activación del Porriño fue positiva, con Lucía Laguna -infalible ayer con cinco goles en otros tantos lanzamientos justo entre la recta final de la primera mitad y el arranque de la segunda; Aitana Santomé acabó con 6 de 6-, Daniela Moreno y la aportación puntual de Paulina Pérez Buforn comandando el ataque. Y al movimiento clave del paso a la defensa 5.1, que molestó horrores a las escasas piezas de ataque turcas, cada vez más cansadas. En menos de diez minutos, un 23-17 ya reflejaba que el despegue porriñés iba en serio. Con un ritmo de juego que el rival no era capaz de seguir.

Lo más cerca que estuvo el Bursa del Porriño de ahí al final del partido fue a cuatro goles (24-20, m.41). Y lo más lejos a nueve (33-24, m.56) justo antes de una recta final que no fue redonda. De ahí que la renta fuese ‘sólo’ de ocho goles al final. Debería ser suficiente pese al lógico cansancio que este domingo amenaza al Porriño, aliviado por el buen reparto de minutos de ayer.