El Balonmán Cangas no falló ayer en una jornada trascendental y se hizo con la victoria a domicilio en su duelo a cara de perro ante un rival directo en la tabla como el Blendio Sinfín, que ahora queda por detrás de los cangueses a cinco puntos en la tabla clasificatoria. El equipo de Nacho Moyano dominó el juego y el marcador de principio a final e incluso tuvo sus opciones de sentenciar en el tramo final del primer acto, pero los cántabros se recuperaron y no sería hasta mediada la segunda mitad, cuando un Jorge Pérez, que ya había sido el mejor, rompió el partido con sus paradas.
El lateral Brais González acertó con la red en la primera posesión de un partido que se inició también con grandes paradas de Jorge Pérez y el local Matic Gerčar. Los nervios estaban a flor de piel por lo mucho que se jugaban ambos conjuntos y que el equipo cangués se pusiera 1-3 en el cuarto minuto gracias a sus veloces transiciones, eran la mejor manera de comenzar. Su oponente respondió empatando por la vía rápida.
Los de Nacho Moyano pagaban su errores en forma de pérdidas o malas definiciones y con ambos porteros atajando mucho e incluso Jorge Pérez un siete metros, Moisés Simes movía el electrónico desde los siete metros (4-5, min. 14). La renta visitante no tardó en ser de dos goles, gracias a más paradas del cancebero cangués y un golazo de Quintas. Todo ello en un partido donde las defensas estaban siendo superiores a los ataques. Con 5-8 llegó el tiempo muerto del entrenador local, Rubén Garabaya.
De vuelta al juego el capitán local ejecutó perfecto el ataque estudiado, pero el Cangas dejaba mejores sensaciones a todos los niveles (6-10, min. 21) y con un Toth letal en la definición incluso obligaba a su adversario a atacar sin portero para poder seguirle el ritmo anotador. Entonces Jorge Pérez atajó su segundo siete metros y el equipo ganó una superioridad para colocar una nueva máxima ventaja con el 8-13, que pudo ser mayor porque se falló una vaselina a puerta vacía. El equipo morracense desperdició su primera ocasión de poner tierra de por medio y al descanso su rival seguía vivo (12-14).
Decisión tras el descanso
La segunda se inició a un buen ritmo anotador, con los dos equipos teniendo buenas ideas en ataque y sin que la renta de dos goles se viera alterada (15-17). Entonces Jorge Pérez y Matic Gerčar volvieron a echar el cierre a sus porterías y los ataques se alargaron más. Parecía que los equipos se daban una tregua en cuanto al ritmo de juego y ahora la toma de riesgos se medía mucho más. Cualquier detalle sumaba y que el cancerbero cangués siguiese aportando paradas de todos los colores se dejaba notar en el luminoso (16-21, con golazo de ‘fly’ de Dorado).
El portero maño del Cangas había roto el partido y a un Sinfín a punto de caer a la lona que en esta fase sufría como nunca (17-23, min. 21). Lo intentó el Sinfín hasta el final, pero el equipo morracense mantuvo la renta para alejarse del descenso directo que marca su rival con cinco puntos menos.
