En el año y medio largo que Claudio Giráldez dirigió al filial del Celta dejó detalles tácticos marca de la casa. Sello personal. El técnico porriñés ya ha mostrado varios de esos matices en sus dos encuentros al frente del primer equipo. Ayer, por ejemplo, varió a línea de cuatro atrás varias veces, abriendo a Mingueza al lateral derecho, bajando a Manu Sánchez al izquierdo y metiendo a Hugo Álvarez en el centro del campo. Otra clara seña de identidad del preparador céltico es su propensión a cambiar a los centrales durante el encuentro. Lo hizo en Sevilla, retirando a Carlos Domínguez y a Unai Núñez. Y repitió contra el Rayo, al relevar a Carl Starfelt.
Así fue. El zaguero sueco, que arrancó como libre en el once titular, no regresó al campo tras el descanso. En su lugar entró Renato Tapia, que mejoró notablemente la salida de balón del escandinavo, muy perdido en esa faceta dentro de una floja actuación general, con más dudas que certezas. No solo eso. Mediado el segundo acto, Jailson sustituyó a Sotelo para ocupar su puesto en el centro del campo. Sin embargo, tras unos minutos, Claudio ordenó una nueva permuta, en este caso entre ambas piezas de refresco. Así, el brasileño y el peruano intercambiaron los papeles debido a las molestias de Tapia, según informó el técnico porriñés.
Normalmente, los centrales suelen ser los últimos futbolistas de campo que cambian la gran mayoría de los entrenadores. No es el caso de Giráldez. De hecho, relevar a uno, o incluso a dos de los tres hombres con los que acostumbra a contar en la línea defensiva es lo más habitual para el porriñés. Podría pensarse que estas rotaciones en los dos partidos al frente del primer equipo responden a una búsqueda del perfil ideal, que también. Sin embargo, son movimientos muy comunes para él dentro de su plan habitual de variar mucho las alineaciones iniciales. Basta echar un vistazo a los 28 encuentros que dirigió al Fortuna antes del despido de Benítez. Hasta en 20 de ellos, Claudio sustituyó a alguno de sus zagueros con el partido en marcha.
Esto quiere decir que el entrenador de Cans deshizo su línea defensiva en el 71% de sus partidos con el filial y en el 100% con el primer equipo. Además, en seis ocasiones relevó a dos de los tres -cinco con el Fortuna y una con el Celta-. Un ejemplo claro de su gusto por las rotaciones centrales. Tanto antes, como después del pitido inicial.
Cuatro hombres en dos encuentros para el puesto de libre
Los dos partidos de Claudio Giráldez han dejado claro que la idea principal es una, pero que los matices son numerosos en su esquema. Circunscribiendo esta variabilidad a los tres centrales que utiliza el técnico porriñés en su esquema, cabe destacar que ha usado el doble de piezas. Hasta seis futbolistas ocuparon esos puestos contra Sevilla y Rayo. Y, especialmente, destacan las permutas en el puesto de libre. Por el centro del eje han pasado Unai Núñez, Carl Starfelt, Renato Tapia y Jailson Marques.
En su debut en el Pizjuán, Giráldez apostó por el vasco como titular. Tras una floja actuación, Starfelt acabó el choque en su sitio. Curiosamente, fue el sueco el que partió ayer de inicio y, en un llamativo paralelismo, también fue relevado después de mostrarse dubitativo. Tapia arrancó la segunda mitad ahí y Jailson la terminó. En total, tres libres en todo el partido.
Parece claro que ese el puesto que menos claro tiene Claudio en la línea defensiva. Sobre todo porque, en el sector derecho, Mingueza acumuló los 180 minutos y se antoja como pieza clave en el nuevo modelo de juego. En el lado izquierdo, Carlos Domínguez jugó el partido completo ayer y en Sevilla, solo unas molestias musculares lo quitaron del encuentro. La duda, pues, está en el centro.
Tapia: “Han pasado muchas cosas que antes no pasaban”
Renato Tapia debutó ayer con Claudio Giráldez tras recuperarse de su lesión. El peruano, que jugó toda la segunda parte -primero como libre y luego como mediocentro- valoró positivamente la actuación del Celta al ser preguntado por los balones al palo, el gol anulado y el penalti no pitado a Aspas. “Has nombrado muchas cosas que antes no pasaban”, respondió al entrevistador en una entrevista post-partido en Movistar. “En muchos partidos no chutábamos al arco y no teníamos muchas ocasiones de gol. Creo que hoy -por ayer- se jugó muy bien”, incidió.
“Creo que jugamos muy bien y estoy contento por el equipo porque se está identificando con una idea de juego y eso es lo mejor”, añadió el internacional peruano, que se mostró “contento por volver” y dispuesto a “ayudar al equipo desde donde toque", en referencia a su arranque en el banquillo. “Se ha visto en los dos partidos, que lo hemos intentado, que hemos querido el balón, que hemos ido hacia adelante… La gente lo valora mucho y se notó. Siempre se nota. Es uno de los puntos más altos de este club y ojalá siga así”, expresó.
Carlos: “La única pega es que nos faltó efectividad”
Carlos Domínguez destacó el buen papel del equipo vigués ante el Rayo Vallecano. Para el central, “la única pega que se puede poner es que faltó efectividad”, en alusión a las ocasiones marradas. “Tenemos que meter un gol más que el rival y hoy -por ayer- no pudimos. Eso fue lo que nos faltó. Estuvimos bastante bien con el balón y en las vigilancias. Hay que seguir. El equipo está trabajando bien”, proclamó. “Creo que es el camino. Al final, sumar siempre es bueno y lograr cuatro puntos de seis nos da ánimo para afrontar todo lo que queda”, concluyó el defensa canterano.
