El pasado día 31 de enero, en el penúltimo día de mercado de enero, el Celta hacía dos anuncios. Por un lado, el fichaje de Tadeo Allende; por otro, la concesión al canterano Miguel Rodríguez de ficha con el primer equipo, pasando a lucir el dorsal 24. Un paso trascendental para el redondelano, que con 20 años alcanzaba una meta perseguida desde hace tiempo y que, por ejemplo, aún no ha sobrepasado su compañero Carlos Domínguez, pese a llevar más partidos con el primer equipo y compartir con él la presencia continuada a las órdenes de Rafa Benítez este curso.
Ayer, Miguel Rodríguez protagonizó el parte médico celeste al recibir el alta tras superar el traumatismo en el pie izquierdo que lo alejó de las dos últimas convocatorias ligueras ante Cádiz y Almería. Por lo tanto, el técnico celeste podrá disponer de él para el encuentro de este domingo en el Bernabéu, recinto en el que todavía no ha jugado.
Con todo, al atacante desmelenado no le ha sentado demasiado bien haber logrado la ficha con el primer equipo, al menos a nivel deportivo. Desde aquel día 31 en el que se fraguó su crecimiento contractual, no ha vuelto a pisar un campo para jugar. Sus últimos minutos datan del 28 de enero, cuando jugó el último cuarto de hora en la derrota en Balaídos contra el Girona. Cerraba así un mes de enero de mucha actividad para él, al aprovechar la desaparición de los planes del entrenador de Carles Pérez para tener minutos en tres de los cuatro partidos de Liga -incluyendo una titularidad contra la Real Sociedad- y formar parte del once en las tres eliminatorias coperas. Pero a ese enero le siguió un febrero sin minuto alguno, al enlazar tres encuentros completos en el banquillo -Osasuna, Getafe y Barcelona- con los dos de baja por el traumatismo que ahora ha quedado atrás.
Es obvio que la llegada de Tadeo Allende ha relegado al canterano. Y no le ha ayudado la de Javier Manquillo, que permite a Óscar Mingueza adelantar su posición en el campo. Ahora mismo, pese a que Carles Pérez sigue en el ostracismo, Miguel ha pasado de segunda opción -primera por momentos- a tercera. La camiseta con el dorsal 24 sigue esperando ser sudada y mostrada en público.
Swedberg todavía no está descartado
El Celta mantiene cuatro bajas por lesión para el partido de este domingo ante el Real Madrid en el Bernabéu -Aidoo, Dotor, Ristic y Tapia- y mantiene una duda, la de Williot Swedberg. No hay demasiado optimismo en torno al sueco y la recuperación del traumatismo-esguince en su tobillo derecho, que ya no lo dejó jugar contra el Almería. Con todo, hoy pasará una prueba determinante que aclarará si estará disponible.
