El Real Madrid ha convertido la entrada en el Santiago Bernabéu en un lujo. Y no por cuestiones futbolísticas, sino monetarias. Los precios de las localidades se han disparado tras la inauguración de la profunda reforma sufrida por el recinto deportivo y ayer mismo, el menor desembolso posible para el duelo de este domingo ante el Celta era de 140 euros. Obviamente, no es un lugar precisamente preminente ni de gran visibilidad.
Por algo menos de dinero han logrado sus billetes los más de 300 seguidores del Celta que han utilizado al Celta como interlocutor. En concreto, han sido 75 euros el desembolso realizado para intentar hacerse notar en un estadio inmenso con más de 81.000 asientos de aforo.
Esa cuestión económica ha sido la razón de la peña céltica en Madrid, Morriña Celeste, haya decidido no acudir al encuentro de este domingo. Para estos aficionados celestes, acudir sería dar por buena la política de precios del Real Madrid. Por eso, han preferido reunirse como en cada partido en su sede, a la que invitan al celtismo que se desplace hasta la capital (calle San Bernardo 97).