Sin ser, obviamente, un canterano, es casi un canterano. Sin ser, obviamente, gallego, tiene una hija gallega. Sin ser, obviamente, un veterano, ya está entre los 36 jugadores del Celta con más partidos y entre los 14 en Primera División, ránking este último en el que acabará entre los diez primeros muy probablemente al final de la presente temporada. Se trata de Fran Beltrán, quien el pasado viernes, en el triunfo clave ante el Cádiz y realizando uno de sus mejores encuentros de la temporada en lo individual, alcanzó los 200 partidos vistiendo la camiseta celeste, 185 de Liga y 15 de Copa del Rey.
El mediocentro fue en 2018 una fuerte apuesta del Celta, que pagó los 8 millones de su cláusula de rescisión para traérselo de un Rayo Vallecano recién ascendido. Por entonces tenía 19 años y ha ido creciendo dentro del conjunto vigués pero siempre, o prácticamente siempre, jugando. Tanto es así que el de Seseña entra en un exclusivo club de futbolistas que llegaron a los 200 encuentros con el equipo vigués antes de cumplir los 25 años y que completan Manolo ‘Gran Capitán’, Suso Santomé, Gelo, Pepe Lemos, Jorge Otero, Hugo Mallo y Jonny Castro -según datos del siempre fiable estadista Alberto Fernández-. Es decir, que Beltrán ha hecho historia ya al convertirse en el primer futbolista no gallego en llegar a dos centenares de duelos con el bloque celeste antes de los 25 años. Un logro que, a buen seguro, le sentará bien a un futbolista que, desde el primer momento, trató siempre de adaptarse al entorno como uno más.
Además, sus números destapan que ha sido un jugador importante en estas seis temporadas, incluyendo la actual. Su racha más larga sin jugar en Liga es de tres encuentros: en su primera temporada con Fran Escribá en el banquillo y en la actual con Rafa Benítez. En ambos casos, decisiones técnicas puras porque también es un futbolista que apenas se lesiona y que nunca ha llegado a alcanzar las cinco tarjetas amarillas ni ha sido expulsado, por lo que no ha cumplido ningún partido de suspensión por sanción.
En el presente curso, esos tres partidos en el banquillo se dieron en enero pero, desde entonces, ha hilado cinco partidos seguidos como titular disputando todos los minutos. Y eso que, según datos de transfermarkt, es el jugador más bajo de la Liga con su 1,65 metros. La altura no lo es todo.
