Vandalismo sobre bienes públicos en A Guarda

Tras un domingo del Monte de fiesta y encuentro, desde el Ayuntamiento de A Guarda quieren hacer reflexionar tras los actos vandálicos que tuvieron lugar los pasados días y que están totalmente fuera de lugar y de la aceptación social.

Las acciones de unos pocos producen daños de consideración en el mobiliario urbano, e incluso vehículos municipales. Entre estos actos, se levantó la escultura del Lector, del atrio de la iglesia parroquial, que trasladaron a la Plaza do Reló; se sacó del lugar una barandilla en el cruce de la Rúa Galicia con Vicente Sobrino; o se colocaron vallas en la parada de los taxis, solo por citar tres de los desperfectos ocasionados por quienes parecen divertirse provocando daños.

Desde la institución local se recuerda que las acciones de vandalismo, además de las posibles consecuencias legales que puedan derivarse de las mismas, implican una dedicación de recursos públicos, tanto humanos como económicos, para la recuperación del mobiliario o los equipamientos vandalizados, que se dejan de dedicar a la mejora o consevación de otros elementos.

Desde el Ayuntamiento advierten de que no se debe tolerar que unos pocos provoquen este tipo de daños y desperfectos, difundiendo una imagen de la villa como un lugar “sin orden y sin ley”. Las calles, el mobiliario o los vehículos son de todos los guardeses y están a su disposición, por lo que deben de cuidarse y respetarse como tales, por lo que debemos “erradicar de nuestras calles comportamientos incívicos y vandálicos” para que A Guarda sea un lugar admirado por la vecindad, así como por todos aquellos que nos visitan.