Los isleños piden a Medio Ambiente y a la dirección del Parque Nacional que les permitan llevar a familiares y a amigos a sus viviendas
Los habitantes de la Isla de Ons exigen a la Xunta poder hacer uso libremente de sus casas, es decir, acudir a ellas “cuándo, cómo y con quien queramos”.
La nueva normativa del Plan Rector de Usos y Gestión del Parque Nacional das Illas Atlánticas, llevada a cabo por la Consellería de Medio Ambiente y la dirección del Parque Nacional das Illas Atlánticas, limita el acceso a las islas en 1.300 visitas diarias. Este control perjudica a los residentes, quienes aseguran que, en más de una ocasión, no pudieron llegar hasta sus propiedades en la isla.
La Xunta comunicó a los isleños que, desde el 1 de julio, se les cedería un carné personal para garantizarles una plaza en las navieras. "Este carné es menos que nada. Nos dijeron que con él seríamos VIP, pero poder llegar hasta nuestras casas no es ningún privilegio", asegura María José Pérez, habitante de la Isla de Ons.
Esta identificación puede ser utilizada por ascendientes y descendientes de los habitantes de Ons. Por lo tanto, se excluye de esta manera a amigos y demás familiares.
Los vecinos aseguran que estas restricciones han llegado a provocar, en algunos casos, conflictos familiares. "Yo tengo primos que no pueden venir a su aldea por culpa de esto", lamentó María José. Además, la isleña añade que sus hijas no pueden "traer a sus amigas a casa con normalidad, porque puede que no haya sitio en el barco", critica María José.
La mayoría de los habitantes de Ons renuncia a esta propuesta por parte de la Xunta. "No creemos que tengamos que estar identificados con un código. Solo pedimos que no se nos corten derechos. Queremos ir a nuestra casa con total libertad", comentan los vecinos.
La administración calcula que ya se cedieron cerca de 100 carnés a los isleños. Sin embargo, los habitantes de la isla aseguran que estas credenciales se ofrecieron a personas que ajenas que no viven en Ons, acusación que "podemos demostrar y así haremos pronto", aseguran los residentes de la isla.
De los 86 habitantes de la Isla de Ons, tres lo hacen de manera permanente. Los residentes restantes regresan sus casas, en donde crecieron, en mayo, cuando comienza el servicio de las navieras.
Los vecinos lamentan que no haya alternativas ya que los barcos de las navieras son la única opción para poder llegar hasta la isla en la que viven. "No me voy a comprar un barco solo para poder ir a mi casa", comenta María José.
Por su parte, la Consellería alega que se debe realizar un control de acceso al Parque Natural para conservar y respetar los valores naturales de Ons.
Los isleños aseguran que, lejos de dañar su tierra, cuidan el entorno en que el viven. Incluso critican que, al no poder acudir a la isla antes del mes de mayo, muchas fincas y casas presentan averías. Entre ellas, las más comunes son en los pozos de las vivendas con las que se encuentran al volver después de un año.
Los miembros de la Asociación de Vecinos Illa de Ons, que cada vez está ganando más fuerza, se han unido tras esta problemática. La entidad, con el apoyo del alcalde del Concello de Bueu, Félix Juncal, convocó asambleas en varias ocasiones para exigir el derecho de poder ir a su casa con libertad. Sin embargo, los vecinos critican que no han optenido ninguna respuesta por parte de la Consellería de Medio Ambiente ni de la dirección del Parque. "Les hemos propuesto muchas alternativas pero ni nos escuchan", comentan los vecinos. "Para avisarnos de que tenemos que pagar 1.500 euros cada mes, sí que tienen prisa", critican los habitantes de Ons.
La conselleira de Medio Ambiente, Ángeles Vázquez, se comprometió a hacer una excepción en las limitaciones de acceso los días 23, 24 y 25 de agosto, con motivo de las fiestas patronales de San Xaquín. De esta manera, los habitantes podrán invitar a sus viviendas a amigos y familiares sin ninguna restricción.
La nueva normativa del Plan Rector de Usos y Gestión del Parque Nacional das Illas Atlánticas, llevada a cabo por la Consellería de Medio Ambiente y la dirección del Parque Nacional das Illas Atlánticas, limita el acceso a las islas en 1.300 visitas diarias. Este control perjudica a los residentes, quienes aseguran que, en más de una ocasión, no pudieron llegar hasta sus propiedades en la isla.
La Xunta comunicó a los isleños que, desde el 1 de julio, se les cedería un carné personal para garantizarles una plaza en las navieras. "Este carné es menos que nada. Nos dijeron que con él seríamos VIP, pero poder llegar hasta nuestras casas no es ningún privilegio", asegura María José Pérez, habitante de la Isla de Ons.
Esta identificación puede ser utilizada por ascendientes y descendientes de los habitantes de Ons. Por lo tanto, se excluye de esta manera a amigos y demás familiares.
Los vecinos aseguran que estas restricciones han llegado a provocar, en algunos casos, conflictos familiares. "Yo tengo primos que no pueden venir a su aldea por culpa de esto", lamentó María José. Además, la isleña añade que sus hijas no pueden "traer a sus amigas a casa con normalidad, porque puede que no haya sitio en el barco", critica María José.
La mayoría de los habitantes de Ons renuncia a esta propuesta por parte de la Xunta. "No creemos que tengamos que estar identificados con un código. Solo pedimos que no se nos corten derechos. Queremos ir a nuestra casa con total libertad", comentan los vecinos.
La administración calcula que ya se cedieron cerca de 100 carnés a los isleños. Sin embargo, los habitantes de la isla aseguran que estas credenciales se ofrecieron a personas que ajenas que no viven en Ons, acusación que "podemos demostrar y así haremos pronto", aseguran los residentes de la isla.
De los 86 habitantes de la Isla de Ons, tres lo hacen de manera permanente. Los residentes restantes regresan sus casas, en donde crecieron, en mayo, cuando comienza el servicio de las navieras.
Los vecinos lamentan que no haya alternativas ya que los barcos de las navieras son la única opción para poder llegar hasta la isla en la que viven. "No me voy a comprar un barco solo para poder ir a mi casa", comenta María José.
Por su parte, la Consellería alega que se debe realizar un control de acceso al Parque Natural para conservar y respetar los valores naturales de Ons.
Los isleños aseguran que, lejos de dañar su tierra, cuidan el entorno en que el viven. Incluso critican que, al no poder acudir a la isla antes del mes de mayo, muchas fincas y casas presentan averías. Entre ellas, las más comunes son en los pozos de las vivendas con las que se encuentran al volver después de un año.
Los miembros de la Asociación de Vecinos Illa de Ons, que cada vez está ganando más fuerza, se han unido tras esta problemática. La entidad, con el apoyo del alcalde del Concello de Bueu, Félix Juncal, convocó asambleas en varias ocasiones para exigir el derecho de poder ir a su casa con libertad. Sin embargo, los vecinos critican que no han optenido ninguna respuesta por parte de la Consellería de Medio Ambiente ni de la dirección del Parque. "Les hemos propuesto muchas alternativas pero ni nos escuchan", comentan los vecinos. "Para avisarnos de que tenemos que pagar 1.500 euros cada mes, sí que tienen prisa", critican los habitantes de Ons.
La conselleira de Medio Ambiente, Ángeles Vázquez, se comprometió a hacer una excepción en las limitaciones de acceso los días 23, 24 y 25 de agosto, con motivo de las fiestas patronales de San Xaquín. De esta manera, los habitantes podrán invitar a sus viviendas a amigos y familiares sin ninguna restricción.
