Hace unos días tuve que ir a los Juzgados de Vigo, citado en un juicio como testigo por mi condición de médico, por haber atendido tiempo atrás a un accidentado.
Al terminar mis declaraciones, la Magistrada me dio permiso para abandonar la sala, sabedora de que había interrumpido mi consulta de la mañana, anulado varias citas (pacientes que tengo que ver otro día, en mi horario libre), y que al haberse retrasado un poco las declaraciones yo ya tenía enfermos esperándome en el Hospital donde trabajo.
Antes de irme, manifesté que quería presentar la solicitud para cobrar la indemnización económica que la ley establece en estos casos, y la Magistrada me dijo que le parecía muy bien: que la presentara fuera en la secretaría. Al salir de la sala de vistas, la funcionaria que atendía la vista salió detrás de mi, y también muy amablemente me entregó un papel para que lo rellenara, y me dijo que lo entregara en la sala contigua, en la Secretaria de ese juzgado. Rellené el impreso allí mismo, y fui a entregarlo.
Y entonces me encontré con una funcionaria que me dijo que no podía entregarlo allí, que tenía que llevarlo al Registro Central, que está en el otro edificio de los Juzgados.
Manifesté mi contrariedad y mi asombro, sobre todo porque yo estaba haciendo lo que me había dicho la Magistrada, que se supone tiene la máxima autoridad en esa Sala. La funcionaria me dijo que desde hacía un mes el sistema había cambiado, y que ella no podía recoger allí ni ese ni ningún otro documento. Protesté enfadado, por los motivos expuestos y porque consideraba inadmisible que no pudiera entregar en ese juzgado un papel que iba dirigido a ese mismo juzgado. Al hacerse evidente la discusión, intervino la Secretaria judicial, quien en tono conciliador me explicó que efectivamente las normas habían cambiado, y que aunque ella era la destinataria de mi solicitud, y quien tenía que resolverla, "alguien" había ordenado que los escritos como ese se entregaran en el mencionado Registro, ubicado en no sé qué sitio de un edificio cercano. Le di las gracias por las explicaciones, y antes de salir pedí perdón a la funcionaria por haberme enfadado y contestado ariscamente: espero que me disculpe y que entienda mi indignación.
Por la hora que era, y por respeto a mis pacientes (para no ocasionales una espera excesiva evitable), decidí no ir en ese momento al otro edificio de los juzgados a entregar la solicitud, que algún funcionario tendría que haber recibido allí, y otro funcionario tendría que haber trasladado a la Sala en la que yo estaba en ese momento. Me fui al Hospital a seguir trabajando, y tendré que ir algún otro día a entregar la solicitud, si es que puedo.
Me pregunto si ese "alguien" que tomó esa decisión, que en casos como el descrito complican la burocracia, ralentizan la justicia, hacen que cada vez más personas hagan menos, y pueden causar trastornos a los ciudadanos (como es el caso), no será una de esas personas puestas a dedo por amistad, incapaz para el puesto de responsabilidad que ocupa. O cuyo objetivo era crear un nuevo puesto de "receptor de documentos" para poder colocar a un amigo... Con organizadores como ese "alguien" cada vez necesitaremos más funcionarios para hacer menos cosas y más lentamente...
Los que queremos que la sociedad funcione bien, y especialmente la justicia, tenemos que protestar, y así lo hago, con la esperanza de que se rectifique el protocolo mencionado, y de que el "alguien" responsable responda de sus decisiones, y deje de complicarnos la vida los demás: al menos a mí.
