WhatsApp es el nombre del nuevo fenómeno de comunicación en las redes sociales que deriva de una pregunta común y coloquial del mundo anglo-sajón en inglés ‘What’s up?’ que es como, ‘¿Qué pasa tío?’ o ‘¿Que hay?’ Es otro nombre en el vocabulario que le ponen los americanos, que son los inventores del lenguaje moderno de la informática como pueden ser, ‘Cookies’ que significan galletas, ‘Twitter’, el cantar de un canario o ‘LinkIn’, ‘Ya está enganchado’, para dar ejemplos. Pero todo esto es irrelevante ante lo que verdaderamente implica esta nueva droga de enganche juvenil y no tan juvenil de ‘charlas’ de texto en la ciudadanía tanto nacional como internacional. Uno solo tiene que caminar por cualquier pueblo o ciudad para ver la cantidad de ciudadanos con los ojos fijos en el aparatito maldito con ambas manos tecleando ferozmente contestando a cuanta pregunta o comentario aparece en la pantalla de personajes que pueden estar hasta en la luna. Ya había comentado en otro artículo de los avances en los ordenadores y la informática y como han cambiado la vida en general; pero lo de este nuevo sistema aunque apenas tiene unos años se lleva la Palma de Oro, el Oscar y el Premio Nobel de todos los tiempos. En la final de la copa del Rey entre el Barça y el Sevilla durante un enfoque al palco en donde estaba Felipe VI dos personas detrás del mismo estaban dale que te pego tecleando en los aparatos. Siguiendo con el futbol, en la final de la Champions entre los equipos de Madrid asistí a mi cafetería de siempre para disfrutar con las peñas. En la mesa de al lado, cuatro jóvenes seguían el partido cada uno con su móvil. De vez en cuando miraban a la pantalla a ver que pasaba. Pero aquí no acaba el tema. Poco a poco van cerrando librerías y kioscos de periódicos y revistas. Aquí en Vigo, hace poco un kiosquero en la Plaza de España, después de más de 40 años tuvo que cerrar porque ya no rendía el negocio. Dicen que en España, cada día cierran librerías. ¿Qué esta pasando? Según las estadísticas el 40% de los jóvenes apenas leen un libro al año. ¿Y los periódicos y revistas? ¿Tienen los días contados? Durante la campaña electoral la oposición acuso al presidente en funciones de solo leer el Marca. ¡Menuda paradoja! ¡A ver cuantos políticos de la nueva ola leen periódicos! ¿Se le puede culpar este bajón a este sistema de comunicación? Pasemos a las estadísticas del mismo. Hay mundialmente más de 900 millones de usuarios diarios con un promedio de media hora por día. Va en aumento y le gana al SMS con un 50% más de uso. España encabeza el número de usuarios por habitante. Un fenómeno increíble. Ahora los peligros, especialmente para los más pequeños. Según un estudio del NSPCC, la ‘Asociación de Prevención de Crueldad hacia los Niños/as’ del Reino Unido es imprescindible que los padres y madres sepan de los siguientes peligros del uso indiscriminado del sistema. Contrario a lo de Facebook y Twitter, WhatsApp no necesita una ‘contraseña’, no hay límite de adjuntos tanto de fotos como pornografía, no hay control de edad y lo que es más grave los usuarios están a la merced de las mafias de pederastas y otros sinvergüenzas en las redes. Por último, por ahora y hasta cierto punto el servicio es gratis pero el fundador Jan Koum de USA, que es el de Facebook está planeando varios sistemas para poder ‘sacarle jugo’ a su exitoso diseño. Que los usuarios, y me incluyo, estemos atentos aunque sigamos enganchados.
