Que entre lo ridículo y lo heroico solo hay un paso es cosa sabida ; pero el Sr. Pablo Iglesias en las galas Goya acaba de hacer una demostración práctica de ello. El ir a entrevistarse con el Rey en mangas de camisa, por cierto "arremangás", sobre estúpido fue una grosería , pero el culmen de la majadería fue a continuación presentarse en los premios Goya de Smoking , por cierto con la pajarita torcida . Pero, ¿a quién quiere engañar este "personaje"? El plan que sigue es de libro : Crear confusión, arruinar la Nación con el consiguiente malestar social y mediante un populismo feroz borrar todo resquicio de libertad para hacerse con el poder , vamos, una segunda Venezuela financiada, (el poder claro) por los ayatollahs iraníes, para así facilitar la entrada del Islam más retrógrado en Europa. Y a los españoles que les den.
