RECUPERACIÓN DEL CASCO VELLO

El Registro de la Propiedad abrirá en la calle Real en otoño

Sobre estas líneas, aspecto de la calle Real y de los edificios que acogerán después del verano la sede de los Registradores de la Propiedad. Encima, la fotografía de la zona tomada hace cinco años, completamente deteriorada.
photo_camera Sobre estas líneas, aspecto de la calle Real y de los edificios que acogerán después del verano la sede de los Registradores de la Propiedad. Encima, la fotografía de la zona tomada hace cinco años, completamente deteriorada.

La nueva sede de los registradores devolverá a la calle su lugar de honor en el Casco Vello

La nueva sede de los Registradores de la Propiedad, que abrirá tras el verano, devolverá a la calle Real su papel predominante en el Casco Vello tras varias décadas convertida en una de las más deterioradas del barrio. Las obras de la sede que agrupará a todos los registradores de la propiedad de Vigo –ahora distribuidos en cinco registros entre varios edificios en la calle Luis Taboada y otro en la calle Areal– están concluidas en el exterior y los operarios trabajan ahora en el interior del inmueble con el objetivo de finalizar en el mes de mayo para entregar el edificio antes del verano. 
“Se está organizando ya la mudanza”, se limitaron a precisar fuentes oficiales al respecto del traslado, que se producirá en otoño como fecha límite y pondrá fin a años de espera ya que los cuatro edificios que se han rehabilitado para albergar la sede de los Registradores de la Propiedad fueron adquiridos al Consorcio del Casco Vello por 3,4 millones de euros tras la firma de un convenio en 2007. Se trata de los edificios de Rúa Alta, 26 y Real 29-31 y 33. El último de ellos es uno de los más emblemáticos del Casco Vello ya que durante el breve periodo de tiempo en que Vigo fue capital de provincia –entre 1821 y 1823– fue la sede del ente provincial. 
Las obras de la futura sede, a cargo de la empresa San José y de los arquitectos Jesús Irisarri y Guadalupe Piñeira, se retrasaron durante años por la irrupción de la crisis económica y el relevo en la directiva del Colegio de Registradores de la Propiedad y Mercantiles de España pero desde hace casi dos años avanzan a buen ritmo y ya han transformado el perfil de la calle Real. 
La propuesta de los dos renombrados arquitectos vigueses, que comparten estudio desde hace veinticinco años, fue preservar los edificios y sus particularidades pero dotándolos de funcionalidad y una mayor amplitud al transformar antiguas viviendas en modernas oficinas. Además, se han recuperado elementos singulares tapados por añadidos que se incorporaron durante los años en los que no había ningún tipo de control urbanístico en el Casco Vello ni en el resto de la ciudad.n

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