Cerca de 200 funcionarios de los juzgados recorrieron ayer el centro de Vigo para denunciar la “discriminación laboral” que padecen con respecto a otras comunidades autónomas del Estado.
Lo hicieron en la séptima jornada laboral de huelga indefinida que mantiene paralizada los juzgados.
Los manifestantes, algunos de ellos ataviados con ropa de luto, corearon consignas como “Rueda dimite, la justicia no te admite” o “mismo trabajo, igual salario”.
La movilización finalizó con una cacerolada ante la delegación de la Xunta donde mostraron un ataúd con un “meco” con la imagen del presidente autonómico, Alberto Núñez Feijóo.
El portavoz de Alternativas na Xustiza, Pablo Valeiras, censuró en declaraciones a los medios de comunicación, la “cerrazón absoluta” profesada por los representantes del Gobierno gallego durante los encuentros mantenidos con la representación social.
Criticó especialmente la actitud de Alfonso Rueda, vicepresidente de la Xunta y conselleiro de Presidencia, Administraciones Públicas y Justicia, ya que “habla constantemente de cosas que nunca se dijeron en la mesa de negociación”.
Mientras, los juzgados continuaban con escasa actividad, incrementando el número de asuntos paralizados y que amenazan con una avalancha.