VIGO

Los notarios de Vigo confían en “desahogar” a los juzgados

Los notarios se hacen cargo desde finales de julio de varios actos hasta ahora sólo judiciales.
photo_camera Los notarios se hacen cargo desde finales de julio de varios actos hasta ahora sólo judiciales.

La nueva ley les permite ya  formalizar separaciones y divorcios sin hijos y podrán casar en  2017

Desde el pasado 23 de julio, los 17 notarios de Vigo cuentan con nuevas atribuciones de los juzgados y el Registro Civil gracias a la entrada en vigor de la Ley de Jurisdicción Voluntaria. Una de las principales novedades es la posibilidad de deshacer matrimonios, separaciones y divorcios de mutuo acuerdo, siempre que no haya hijos  a cargo o incapaces en el proceso. 
La misma norma incluye la posibilidad, también voluntaria, de escriturar matrimonios, una novedad que no será efectiva hasta junio de 2017 y cuya tasa según la ley será de 95 euros.
Según explica la decana del Colegio de Notarios de Galicia, Isabel Louro García, “es una ley que llevábamos esperando desde 2001 para tratar de desahogar de trabajo a los juzgados”. Asegura que en el caso de las separaciones y divorcios, las parejas tienen que acudir con asistencia letrada pero “no habrá que esperar”.
Hay que recordar que los juzgados de Familia son una de las jurisdicciones con más sobrecarga de trabajo en Vigo, que ha requerido de un refuerzo durante todo este año y que cuenta sobre la mesa con una solicitud en firme para la creación de un tercer órgano.
La nueva ley también permite acudir al notario para recuperar deudas sobre las que no se tenga duda de su existencia, reconocimiento de filiación no matrimonial, expedientes sobre adopción y declaraciones de herederos colaterales de personas que hubieran fallecido sin dejar testamento, así como realizar actos de conciliación.
La plataforma SOS Xustiza calcula que todas estas atribuciones supondrán alrededor de un tercio del trabajo que actualmente llevan los juzgados, si bien éste y otros colectivos judiciales criticaron la norma por considerarla una forma de privatizar un servicio público.
Sobre el coste, la decana del Colegio de Notarios insistió en que “los notarios cobramos por aranceles mientras que los juzgados lo hacen por los presupuestos” y aseguró que todo depende del acto que se lleve a cabo, señalando que “en los concellos y las iglesias se paga por utilizar las dependencias, será algo parecido. Desde luego no vamos a tener un salón noble como Castrelos porque es algo diferente, una firma de escrituras en un despacho, como la inscripción de parejas de hecho”.
Aseguró asimismo que  “los notarios contamos con formación jurídica y por eso se ha puesto en marcha esta ley”.

La crisis incrementó las donaciones en vida de padres para ayudar a los hijos

Recientemente, el Colegio notarial publicó por primera vez los datos del Observatorio de su realidad socieconómica en los últimos diez años, con un resultado optimista tras un descenso consecutivo hasta el 2013 en los actos notariales.
En Vigo, el balance demuestra que hubo mejores datos en 2014 que en 2013 con un ligero repunte de actividad por primera vez desde que inició la crisis y sin descenso.
Isabel Louro asegura que por lo general los datos siempre son más positivos en el sur de Galicia, respecto al resto de la comunidad.
Lo más llamativo fue el incremento de las renuncias a herencias, una figura, según la decana, que apenas se utilizaba. “El hecho de asumir la responsabilidad cuando las herencias costaban de bienes inmuebles, pensando que había que pagar un impuesto y después intentar vender con la dificultad que eso conlleva hizo fue la principal causa de este incremento de renuncias”, explica. En concreto, las cifras hablan  de un total de 712 renuncias a herencias sólo durante el año pasado en toda la provincia, lo que supone en términos generales que en Vigo se triplicaron desde 2011.
Frente a este fenómeno, la crisis también ha demostrado que “los padres están apoyando económicamente a sus hijos”, afirma la decana a juzgar por el aumento de donaciones en vida. Esta figura nunca ha sido infrecuente entre los actos notariales pues, asegura, “va un poco con el carácter de los gallegos”, no obstante, el repunte ha sido notable en estos años.
Durante el año pasado, en Vigo y el resto de la provincia se hicieron un total de 13.501 testamentos y escritos de últimas voluntades, mientras que las donaciones en vida fueron de  1.579, tal y como recogieron los 53 notarios que dan servicio en el territorio provincial.
Otro dato a nivel general son el descenso de los apoderamientos, con una caída del 24% 

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