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Febrero rozó los 24 grados en Vigo, la máxima del siglo

En esta ocasión el termómetro de As Travesas sí estaba acertado al marcar 23 grados.
photo_camera En esta ocasión el termómetro de As Travesas sí estaba acertado al marcar 23 grados.

Las temperaturas volvieron a alcanzar niveles primaverales por una corriente cálida

Vigo registró ayer una máxima de 23,8 grados, una temperatura  que se colocó entre las más altas de Galicia y que ha marcado un hito: es la máxima alcanzada para febrero desde que la agencia gallega de meteorología (Meteogalicia) tiene controles en la mayoría de municipios, lo que hizo desde finales de la primera década de este siglo. 

En  febrero de 2018, Meteogalicia había destacado una máxima en Vigo de 18,7 grados en sus tres puntos de control (puerto, avenida de Madrid y campus, con notables diferencias entre ellos) y en los ejercicios anteriores la temperatura más alta se había alcanzado en 2017, con 20,5 grados, ayer pulverizados. En el resto de segundos meses los valores más altos no pasaban de 17 grados, normales para el invierno. Pero ya no.
Curiosamente, según Meteogalicia, la máxima de la comunidad autónoma la tuvo ayer A Coruña, donde se superaron los 24,3 grados debido a una corriente cálida que llega por el Cantábrico y que ha afectado de forma directa  otras ciudades de la misma cornisa, con Bilbao y San Sebastián a la cabeza. Pero también en las Rías Baixas, y en la ciudad de Pontevedra hubo 24 grados. Algo más bajas en el interior de Galicia, donde el invierno se mantiene de noche y la diferencia térmica alcanzó en algunos puntos los 20 grados entre las máximas y mínimas.
Para los próximos dos o tres días habrá algunas oscilaciones, según señala el pronóstico, con cielo con nubes de tipo medio y alto, con cielo más nublado en el noroeste, donde podría haber alguna lluvia ocasional.
En Galicia, según la información publicada por la Consellería de Medio Ambiente, el viento soplará flojo de componente sur, aunque con algún intervalos fuerte a primera horas en la Costa da Morte. En cambio, las temperaturas no experimentarán cambios significativos. De este modo, en las ciudades gallegas las máximas subirán hasta los 21 grados en Ourense, mientras que los valores mínimos descenderán hasta los seis grados en Lugo y en la capital ourensana. Para mañana, domingo, se espera incluso que Vigo pueda alcanzar de nuevo los 23 o 24 grados. n

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