La infraestructura que une Porta do Sol con el Concello es la primera obra en España con fondos europeos del programa Desarrollo Urbano Sostenible
Una de las infraestructuras emblemáticas de la ciudad, las escaleras mecánicas de II República, que unen Porta do Sol con Abeleira Menéndez, se pusieron ayer en funcionamiento (el primer tramo ya estaba y ahora se abrió el segundo). El alcalde Abel Caballero aseguró que "estamos ante una obra de importancia capital, es la incorporación de Vigo a la modernidad, el logro para salvar grandes obstáculos gracias a la tecnología", destacó el regidor.
El acto de puesta en servicio de las escaleras contó con la animación de Fanfarria Taquicardia de Troula Animación y el alcalde estuvo acompañado por los dos tenientes de alcalde, Carmela Silva y David Regades, y buena parte de los concejales de su gobierno.
La construcción de esta segunda fase (la primera es el tramo entre Porta do Sol y Cruz Verde) supuso una inversión de 1 millón de euros, de forma que el coste total de la obra alcanzó los 1,8 millones.
El alcalde destacó que esta es la primera obra en España que se inaugura con fondos europeos del programa Desarrollo Urbano Sostenible (Edusi), "lo que demuestra nuestra eficiencia y la razón por la que nos concedieron los proyectos", señaló Abel Caballero.
Caballero calificó la actuación como "extraordinaria, justificada y notable" y señaló que "queremos que permanezca como un símbolo de lo que estamos a hacer en Vigo y de lo que queremos seguir haciendo".
El alcalde indicó que la "subida imposible" entre la Porta del Sol y el Campo de Granada se convierte en un modo de transporte que une dos zonas de la ciudad que estaban separadas.
La obra de las escaleras de II República forman parte del proyecto Edusi (Desarrollo Urbano Sostenible) "Una manera de hacer Europa" que a través del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder) concedió un total de 15 millones para el programa Vigo Vertical, a través del que se desarrollan otras obras en la ciudad.
Durante la construcción de esta segunda fase de las escaleras aparecieron restos arqueológicos, una parte de la antigua muralla de la ciudad y una mina de agua que fue preservada y que se puede ver mediante una puerta de cristal y un panel con toda la información histórica.